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No se repuso la iluminación, ni los semáforos desmontados para el ensanche de la calzada, y preocupa el que estaba instalado en la calle que conduce al Hospital Neonatal.
A un mes de dada por finalizada la esperada obra de ensanche de la ruta Nacional Nº 8 desde el cruce a Presidente Derqui y la calle Guido, persisten graves falencias en materia de iluminación, señalización y seguridad vial en varios tramos de la remozada traza vial, por la que transitan diariamente miles de autos, líneas de colectivos y transportes de todo tipo.
Al respecto, ya a principios de diciembre del año pasado, ante el inminente final de obra y con la presunción cierta de que iban a quedar varios sectores sin terminar, la Cámara de Comercio de Pilar inició un expediente en el Municipio, haciendo el reclamo correspondiente a las autoridades todavía en funciones, a fin de que trasladaran el petitorio al gobierno nacional, responsable de la financiación y control de los trabajos en cuestión.
En un comunicado, la entidad expresaban la preocupación al comprobar que incluso había quedado un tramo sin ensanchar, precisamente desde el puente del arroyo Burgueño hacia el cruce de Presidente Derqui y solicitaban “su ensanche, construcción de una senda peatonal y vallado de protección, en el sector del puente del arroyo Burgueño”.
Sin embargo las obras se dieron por concluidas, quedando unos 200 metros con la traza original de dos manos, produciéndose un ‘embudo’ para el tránsito vehicular que circula por el peligroso sector.
En el comunicado de SCIPA se aludía también que en el lugar “se puede observar la falta de señalización y de iluminación, confundiendo no solo a los automovilistas, sino también a los transeúntes que cruzan sobre este puente”. La inquietud también fue trasladada en esa oportunidad al intendente entrante Federico Achával.
Todos estos problemas subsisten en la actualidad, con el agravante de que hay semáforos que no funcionan como el del ingreso al country de la Sociedad Hebraica y otros que directamente no fueron repuestos, como el de la calle Madreselvas, importante vía de acceso que utilizan colectivos y vehículos en general para dirigirse al Hospital Neonatal en Panamericana.
Por otra parte, también persiste la falta de iluminación en varios tramos de la ruta y se abrió una alcantarilla en el centro de la calzada, a la altura del campo de deportes de Hebraica, en la mano que va a Pilar. Manos solidarias y anónimas colocaron a manera de señalización un tambor de aceite sobre el peligroso hueco que quedó abierto en el asfalto.
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