Si bien no se han registrado casos en Pilar, desde el Municipio ponen énfasis en la prevención y buscan concientizar a los vecinos sobre el contagio y el correcto accionar ante cualquier situación.
Ante el brote de Hantavirus en Epuyén, provincia de Chubut, el Municipio a través de su Departamento de Medicina Preventiva, continúa llevando a la población una serie de recomendaciones que tienen como objetivo evitar el contagio de esta enfermedad.
Cabe recordar que el hantavirus tiene su origen en los roedores, afecta directamente las vías respiratorias de los humanos y puede ser fatal si no es tratado a tiempo. Los ratones silvestres lo transmiten a través de la saliva, la orina o las heces, y al secarse, se combina con el polvo y se transporta por el aire.
Desde la Comuna indican que los síntomas se asemejan a un estado gripal: fiebre, decaimiento, dolores musculares, escalofríos, dolores de cabeza, náuseas, vómitos, diarrea y en algunos casos, dolores abdominales o en la parte baja de la columna.
Respecto a esto, la responsable de Medicina Preventiva, Ana Valentinuz remarcó: “Si bien en Pilar no se detectó ningún caso positivo por esta enfermedad, queremos trabajar fuertemente en la prevención. Para eso es fundamental que la comunidad conozca cuáles son las vías de contagio. En ese sentido cabe señalar que es una enfermedad que se transmite por inhalación cuando respiramos en lugares abiertos o cerrados: donde las heces o la orina de los roedores infectados desprendieron el virus contaminando el ambiente”.
Y agrega que las personas también pueden contagiarse por contacto directo, “al tocar roedores infectados vivos o muertos, incluso sus heces u orina”. “Además hay otra forma de contagio que se da por mordeduras de roedores infectados y una última vía de transmisión es la interhumana, mediante el contacto estrecho con una persona infectada durante los primeros días de síntomas, a través de la vía aérea. Por todo lo expuesto es preciso que la comunidad realice distintas acciones para evitar el contacto con roedores tales como tareas de limpieza, ventilación, tapar rejillas y otras medidas destinadas a prevenir la propagación de esta enfermedad”, concluyó.
Entre las recomendaciones se destacan: Evitar la convivencia con roedores y el contacto con sus secreciones; tapar orificios en puertas, paredes y cañerías; realizar la limpieza con lavandina y evitar barrer para no levantar polvo; desmalezar; ventilar lugares que hayan estado cerrados antes de ingresar; si se encuentra un roedor muerto rociarlo con lavandina, luego recogerlo usando guantes y enterrarlo a más de 30 centímetros de profundidad o quemarlo. Las personas que presenten síntomas de la enfermedad deben concurrir rápidamente a un establecimiento de salud para la consulta y evitar el contacto estrecho con otras personas.
Dejar un comentario