Real Pilar sufrió un duro golpe en la décima jornada del Torneo Apertura de la Primera B Metropolitana. En el Estadio Municipal, cayó por 1 a 0 ante Ferrocarril Midland, resignando no solo el invicto que mantenía en condición de local, sino también la cima de la tabla de posiciones.
El equipo dirigido por Gabriel Torres fue protagonista durante gran parte del encuentro, mostrando iniciativa y generando las situaciones más claras. Sin embargo, la falta de precisión a la hora de encarar el arco rival le impidió transformarlas en gol y se quedó con las manos vacías en un partido que, por desarrollo, mereció al menos sumar alguna unidad.
Desde el arranque, la tarde comenzó cuesta arriba para el Monarca. A los pocos minutos de juego, Lucas Chambi, una de las piezas más desequilibrantes del equipo, debió salir lesionado tras disputar una pelota con un rival. Su salida prematura desacomodó al equipo, que igualmente logró mantener el dominio del trámite.
El único gol del partido llegó a los 30 minutos del primer tiempo en una acción muy polémica. Lucas Vico apareció en evidente posición adelantada tras un rebote en el travesaño, pero el árbitro no sancionó el fuera de juego y convalidó la anotación, que terminaría marcando el resultado definitivo.
La bronca en Real Pilar no es solo por la injusticia del marcador, sino también por las consecuencias que trae este resultado, porque la derrota lo bajó de la punta. Ahora la misma quedó en manos de Villa San Carlos, que venció por 2 a 1 a Excursionistas y lo superó en la tabla.
El Monarca buscará recuperarse rápidamente y volver a la senda del triunfo el próximo fin de semana, cuando visite a Sportivo Italiano en Ciudad Evita en el marco de la fecha 11.
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