Amontonamientos, demoras en la entrada y salida, tensión, discusiones e inseguridad. Esas son algunas de las inquietudes con las que conviven día a día los usuarios del Ferrocarril Belgrano Norte en la estación Manuel Alberti. Desde que Ferrovías, empresa perteneciente al grupo EMEPA, decidió cancelar las obras, ha generado un clima caótico en los pasajeros a la hora de viajar en el tren.
A pesar de llevar más de un año desde su reapertura, la estación continúa siendo objeto de reclamos por parte de todos los usuarios que abordan el transporte público para llegar a sus trabajos o regresar a sus hogares. "Estación olvidada de Manuel Alberti después de más de un año de la inauguración provisoria. En vez de gastar tanto en rejas, ¿por qué no habilitan las salidas para los pasajeros?", manifestó Hugo Encina, habitué pasajero, a través de sus redes sociales.
Los cuatro accesos al andén, tanto delanteros como traseros, están cerrados y los vecinos no pueden pasar por los típicos molinetes para acceder a los pasos peatonales, los baños están clausurados y las persianas de los comercios están totalmente bajas.
La solución precaria de Ferrovías fue “habilitar una pequeña puerta de emergencia donde pasa solamente una persona. Si una persona tiene que pasar por ahí y todos los usuarios del tren bajan al mismo tiempo, se arman unas colas eternas de quienes salen y los que están esperando para ingresar no pueden”, había declarado la concejal Adriana Cáceres en marzo de este año.
En marzo de este año, se habían habilitados los ingresos y egresos a la estación tras la gran cantidad de firmas de los vecinos de la localidad reunidas por Cáceres. Sin embargo, la alegría duró poco, ya que semanas después, el reclamo había cedido y volvieron a clausurar las bocas peatonales.
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