El sindicato se hizo presente ya que la empresa encargada de la obra se retiró, dejando una deuda con los trabajadores. Alegan que la Provincia no pagó, pero el gobierno lo desmiente.
Luego del reclamo de los vecinos de Villa Astolfi por la continuidad de la obra de la Escuela Secundaria Nº 11, ahora fue el turno de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) de manifestarse en el lugar, ya que la empresa encargada de los trabajos se llevó los diferentes elementos del lugar dando señales de que no volverán a pesar de mantener una deuda con los obreros.
“Estamos desde temprano por un tema que va más allá de lo que es la falta de pago del salario y los depósitos a la gente, y es el vaciamiento de la empresa, que llegó para llevarse las cosas e irse sin pagarle a los compañeros”, contó a Resumen el delegado local de UOCRA, Sebastián Di Fiori.
Asimismo, cuenta que desde la empresa en cuestión, Peniel SRL, “alegan que el gobierno de la Provincia no les paga, y la Provincia dice que les paga, pero alguno está mintiendo y la cuestión es que los 12 trabajadores no están cobrando y no van a hacerlo, porque la empresa vino a buscar las herramientas para irse”.
Por estas cuestiones, la obra se encuentra tomada y según indicó Di Fiori, permanecerá así “hasta que no venga algún responsable de algún lado y nos diga que van a hacer, y firmen un acuerdo con el Ministerio de Trabajo. Hasta ese momento no nos vamos a ir”.
El delegado volvió a plantear que como en todos los conflictos de este tipo, “siempre el último eslabón de la cadena es el que termina afectado, y todos se ajustan por el trabajador. La deuda que pueden tener la empresa o el gobierno con la empresa terminan en el trabajador y su familia sin un plato de comida”.
Di Fiori también dejó en claro que el problema que se está viviendo alcanzó un punto en donde el diálogo y las negociaciones ya no tienen lugar. “No hay otra solución más que se hagan cargo y paguen. Ya dimos un acto de buena fe hace un mes cuando los dejamos seguir trabajando a pesar de las condiciones. Como dirigente a cargo ya no puedo sentarme a negociar más nada que no sea dinero para los trabajadores. No hay vuelta atrás, a nuestros trabajadores los tenemos que cuidar”, señaló.
[blockquote footer=""] “La deuda que pueden tener la empresa o el gobierno con la empresa terminan en el trabajador y su familia sin un plato de comida”[/blockquote]
Finalmente, la incertidumbre respecto a lo que pasará se hizo presente, pero también el apoyo de los vecinos. “No sabemos cómo va a continuar esto, pero no nos vamos a ir de acá hasta tener una solución. Los vecinos están apoyando, fuimos con los chicos a pedir disculpas porque estábamos quemando gomas y todos salieron afuera a decir que sigamos quemando, que no había ningún problema, porque saben que muchos de los trabajadores son del barrio, y también se necesita que el colegio se termine porque hay una necesidad bárbara de espacio escolar”, concluyó.
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