El Monarca madrugará para recibir a Lugano en el Municipal a partir de las 11, con la intención de sumar una nueva victoria.
Después de lo tormentosa que fue la temporada pasada en el Campeonato de Primera D, en donde el equipo se salvó en la última fecha del descenso, se hacía difícil imaginar un presente como el que está viviendo Real Pilar en la actualidad.
Con un plantel completamente renovado y un nuevo cuerpo técnico, el conjunto pilarense demuestra que tiene en claro a qué quiere jugar y le presenta batalla a cualquier adversario. Es por esto que hoy buscará revalidar el buen momento por el que están pasando, se encuentra segundo con 17 unidades, y estirar la racha de victorias cuando hoy reciban al siempre complicado Lugano en el Carlos Barraza a partir de las 11.
Fue un gran juego el que exhibieron durante la última fecha ante Yupanqui, mostrando en su mayor plenitud el gran despliegue colectivo y el buen trato de pelota que tienen para superarlo por 3 a 0 y estirar a cuatro encuentros la racha victoriosa.
En el partido correspondiente a la 11º jornada, que tendrá el arbitraje de Edgar Kopanchuk, los dirigidos por Tomás Arrotea Molina buscarán estirar a cinco la seguidilla para seguir alimentando sus ilusiones de pelear por cosas importantes esta temporada.
Sin embargo, este compromiso no será nada fácil para el Monarca debido a que el rival que tendrá en frente cuenta con gran tradición en la categoría como Lugano. El haber caído como local ante el último equipo del campeonato, Deportivo Paraguayo, hace que el Naranja llegué herido a este encuentro y sea más peligroso para el equipo de nuestra ciudad.
Hasta el cierre de esta edición no existía confirmación acerca de la alineación titular que saldrá a buscar quedarse con los 3 puntos en el Carlos Barraza, de cualquier manera no se espera una gran cantidad de modificaciones con respecto al once que viene de conseguir la victoria la semana pasada. Lo único que se sabe a ciencia cierta es que los jugadores que salgan al campo respetaran la idea que baja desde el cuerpo técnico, jugando la pelota por el piso y con asociaciones colectivas.
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