Este domingo familiares y amigos de Braian Cuitiño, el joven de 22 años asesinado por una patota a la salida del boliche Napoleón, realizaron una marcha pacífica para pedir justicia y homenajear al joven.
Con su madre y hermanas liderando el grupo, unas 50 personas se reunieron en las puertas del local cerca de las 18 a una semana del brutal crimen, portando consigo velas encendidas que luego fueron dejadas en la puerta del lugar – clausurado por el Municipio – junto a la foto de Braian.
El pedido principal fue que los responsables reciban una condena por el homicidio del joven, que era padre de un pequeño de 10 meses. Fue su hermana Belén la que pidió “que no salgan nunca más”, en referencia a los detenidos que hay hasta el momento.
Cabe recordar que, al momento, hay cinco personas apresadas: el último en ser detenido fue Franco Méndez, de 20 años cuando ingresaba a una vivienda ubicada en la calle San Javier, en la localidad de Garín. Méndez está acusado de haber golpeado con sus puños a la víctima para que cayera al suelo, así como también sería quien le propinó diversas patadas. Su hermano, que también fue identificado como parte de la patota, aún está prófugo.
Además, fue apresado el propietario del automóvil utilizado para huir Lucas Iván Castillo (22), Lucía Daniela Armas (18), responsable de haberle propinado dos golpes mortales con un ladrillo, Ariana Dorssi (22) y un adolescente de 17 años.
Armas se negó a declarar ante el fiscal, mientras que Dorssi declaró que ella no le pegó a Braian y que solo intervino para separar a su novio y no respondió preguntas de la Fiscalía. Castillo reconoció que estuvo en el lugar del hecho, pero negó haber participado de la pelea.
Dejar un comentario