Colombia, Estados Unidos, Francia, Sudáfrica, Arabia Saudita, China, Pakistán. Todos estos destinos, así como otros 40 repartidos en cuatro continentes, tienen algo en común. Y es que en cada uno podemos encontrar personas que miran el mundo a través de lentes pilarenses.
Es que la firma Opulens, nacida hace casi tres décadas en un “garage” del distrito, hoy pisa fuerte en el mercado del desarrollo de lentes oftálmicos, exportando su tecnología a todos los rincones del planeta.
Todo comenzó a principio de los ‘90 con los hermanos Mauro y Diego Stabile. La patología de su hermana, quien atravesó dos trasplantes de córnea los hizo conocer el mercado de la óptica, y no dudaron en aprovechar su oportunidad.
En 1994 comenzaron a incursionar en el rubro como una pequeña distribuidora de productos ópticos, pero dos años más tarde se logró adquirir el laboratorio de producción de lentes que proveía a Opulens. Y para 1998, ya se contaba con el edificio propio, actual sede social de la compañía.
Ya en 1999 la empresa había trascendido los límites del distrito y la región, y logró adquirir una distribuidora en Córdoba para atender a clientes del centro y norte del país. Pero no satisfechos, en 2006 se convirtió en la primera compañía de Latinoamérica en adquirir equipos para el tallado de lentes con una tecnología que permitía fabricarlos en forma personalizada, moldeándolos de manera digital según las necesidades del usuario.
De esta manera, los hermanos Stabile pasaron de vender productos a comisión, a distribuir y luego a fabricar en un laboratorio propio. Sin embargo, el gran salto llegaría con el desarrollo de su propia tecnología de diseño de lentes llamada Novar, un software que hoy exportan como servicio y con el que se producen alrededor de 3 millones de pares al mes en todo el mundo.
“Novar fue una de las primeras en el mundo en utilizar este modo de desarrollar lentes personalizadas, pero ese fue solo el comienzo de su carrera de innovaciones. A tono con la era de los algoritmos, el desafío del equipo de investigación y desarrollo de Novar fue ir más allá: ofrecer a otros laboratorios del mundo un software que permite diseñar lentes digitales (especialmente progresivos) y con mejoras de hasta cuatro veces en la resolución óptica de los cálculos de superficies. Sin dudas, este fue el salto tecnológico que le permitió insertarse en las ligas mayores de la óptica mundial”, contaron desde Opulens.
Según indican, el logro fue el resultado de “buscar nuevos horizontes y metas más importantes, por la cual conformamos un equipo multidisciplinario de científicos de áreas como la física, matemática, ingeniería, computación científica, junto a profesionales de la salud visual, que trabajaron en un proceso de ocho años de investigación y desarrollo con la misión de integrar varias tecnologías en pos de mejorar la actividad de laboratorios y profesionales ópticos. De esta labor surgieron nuevas tecnologías y diseños ópticos integrados al software Novar Designer para la producción de lentes digitales en ‘High Definition’. Luego de dos años de intensas pruebas clínicas, las presentamos al mundo en el marco de la feria MIDO 2016 para que todos los laboratorios cuenten con la posibilidad de utilizar esta tecnología en la fabricación de sus lentes”.
La calidad de los profesionales que trabajaron en el desarrollo de esta tecnología permitió lograr una ventaja a nivel competencia con los diseños presentes en el mercado mundial, y Novar comenzó a recorrer ferias internacionales y sumar clientes.
Hoy puede decir que luego de partir desde Pilar, cuenta con presencia en países como Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, México, Estados Unidos, Francia, Italia, Reino Unido, Argelia, Sudáfrica, Emiratos Árabes, Arabia Saudita, Pakistán, India, China, Bangladesh, Myanmar, y muchos más.
“Este logro fue gracias a dos aspectos que influyen sustancialmente. Por un lado, ofrecemos la última tecnología en generación de lentes que hay en el mundo en materia de diseños digitales con un portfolio amplio de lentes. Y, por otra parte, acercamos el equipo de investigación y desarrollo a las necesidades que día a día tienen los laboratorios mundiales en su proceso de fabricación brindando no solo tecnología, sino también consultoría. La combinación de ambos aspectos es sumamente conveniente, sobre todo en un mercado global cada vez más competitivo”, explicaron.
De esta forma, y con la inquietud para seguir investigando y superarse, Opulens es una de las tantas empresas que desde Pilar esperan continuar llevando el ADN local a cada rincón del planeta.
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