La parrilla Rincón de Amigos se despidió de sus clientes y cerró sus puertas tras 15 años

Con agradecimientos hacia todos los que fueron parte y confiaron en el lugar, los dueños decidieron poner punto final al comercio que se encontró con una situación irremontable en plena pandemia.

Luego de 15 años, la emblemática parrilla Rincón de Amigos dio a conocer la decisión de cerrar sus puertas definitivamente. Y es que la pandemia que se vive a nivel mundial ha planteado un año repleto de desafíos, y la economía ha sido una de las grandes víctimas, con un escenario que profundizó muchas veces situaciones que ya eran difíciles.

En este caso, se trata de un comercio gastronómico de larga data en la localidad de Fátima, ubicado en la esquina de Gorostiaga e Isla Blanco, propiedad de Mirta y Martín Trovatelli, históricos vecinos del lugar.

Un lugar ameno que supieron disfrutar muchos desde sus comienzos, cuando brindaba un pequeño espacio con algunas mesas para ofrecer comidas al paso, y hasta sus últimos años, donde la antigua casona invitaba a un buen plato y el jardín permitía un hermoso ambiente durante las épocas de mejor clima.

“¡Amigos! Lamentablemente la situación no nos permite seguir adelante como lo hemos hecho durante estos 15 años que compartimos junto a ustedes. Por eso, decidimos cerrar definitivamente nuestra parrilla. Agradecemos a vecinos, amigos, clientes, empleados y proveedores por todo el tiempo compartido. De corazón, muchas gracias”, comunicaron a través de las redes este domingo, y las respuestas fueron casi inmediatas, lamentando el final del ciclo y reconociendo la atención y el buen ambiente que supieron disfrutar en el lugar.

Si bien el local se encontraba trabajando a través del take away, la situación se hizo insostenible, y no se logró seguir manteniendo el espacio. De todas maneras, sus dueños prefirieron quedarse con los gratos recuerdos y no renegar del presente. En ese sentido, Mirta dialogó con Resumen y señaló: “En verdad yo lo único que tengo es agradecimiento para todos los que nos acompañaron en este tiempo. Nos fue bien, hicimos amigos, muchos clientes, y hoy creo que es más que nada agradecer la gratificación que todos ellos nos dieron. El resto es una anécdota. Son cosas que suceden y nos suceden a todos, nosotros no somos la excepción”. Y agregó: “Gracias a Dios nosotros estamos bien, así que es cuestión de seguir adelante, sólo agradecer por todos estos años que trabajamos junto a nuestros vecinos, clientes y amigos que nos acompañaron en muy buenos años de gratificación personal”.