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Extrajo tierra de un sector del Obelisco porteño, donde estarían los restos del sacerdote. Contó con la autorización de la Direcciones de Espacios Verdes y Mantenimiento del Espacio Público del Gobierno de la Ciudad.
La idea comenzó a esbozarse en la mente del escritor pilarense José Cuello, entusiasta de la historia de la localidad donde reside, cuando terminaba de escribir su nuevo trabajo literario, que habla sobre la vida y obra de uno de los vocales de la Primera Junta de Gobierno del año 1810.
“Estaba escribiendo el último capítulo del libro titulado ‘Tras los pasos de Manuel Alberti’, cuando se me vino a la memoria una pregunta crucial: ¿Dónde descansan sus restos? Tras una rigurosa investigación histórica, llegué a la conclusión de que si en 1811, el presbítero pidió ser sepultado en el campo santo de la iglesia San Nicolás de Bari, ¿qué pasó con sus restos cuándo en 1939 demolieron la iglesia para construir el Obelisco y ensanchar la Avenida 9 de Julio? Una de las posibilidades es que hayan quedado en el lugar –especula el escritor y periodista-. Más allá de la incógnita, mi intención es despertar interés en esta historia desconocida para los argentinos y para los pilarenses y muy especialmente para quienes vivimos en la localidad que lleva el nombre del vocal de la Primera Junta”, expresó Cuello.
Excavación en la Plaza de la República
Decidido a por lo menos excavar en la zona donde se supone está enterrado Manuel Alberti, José Cuello consiguió la autorización del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para incursionar en el lugar, mediante la acción directa de la Dirección de Espacios Verdes de CABA y una cuadrilla de operarios que lo asistieron en la tarea.
El miércoles 9 de mayo, Cuello fue al encuentro de la cuadrilla que lo esperaba a las 8.30 en el lugar señalado para la excavación. “Una vez que les expliqué el proyecto fuimos al lugar indicado y comenzamos a excavar para tomar tierra del lugar donde se supone estarían los restos perdidos de Manuel Alberti –comentó el escritor- a una profundidad coincidente con el suelo de aquel año 1811, cuando falleció el presbítero. Recolecté parte de esa tierra para traerla a Pilar. Por supuesto, todo el proceso fue debidamente fotografiado y filmado, certificando de esta manera la procedencia de esa tierra que tiene un valor histórico tan importante”, consignó el historiador.
La idea de José Cuello es colocar el material extraído en el interior de un monolito que piensa donar e inaugurar en la localidad el próximo 11 de julio “a la memoria de quien da nombre a mi querida localidad pilarense”.
A manera de intercambio de acciones y antes de volver a rellenar el pozo abierto por los operarios, el escritor depositó tierra que llevó de Manuel Alberti en el lugar. “Decidí hacer algo emotivo para los albertinos, y volqué tierra de nuestra localidad en la Plaza de la República. La primera parte de mi proyecto ya está cumplida, solo resta comenzar la construcción del monolito y colocar esta tierra en su interior”, finalizó.
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