Luego de la aprobación en Diputados y a la espera del voto en el Senado de la Nación, se conocieron nuevas posturas desde Pilar respecto del “Aporte Solidario Extraordinario de las Grandes Fortunas”.
En primera instancia, había sido el intendente Achával el que se refirió a la iniciativa, señalado que se trata de “un acto de justicia social”, ya que debido al contexto que se vive, asegura que “el esfuerzo lo tenemos que hacer entre otros, y más aquellos que tienen mayores capacidades contributivas”.
Ahora, fue Roberto Vassolo, economista y profesor del IAE -escuela de negocios de la Universidad Austral-, quien mostró su postura respecto del impuesto, y lanzó: “Nace con una buena intención, en un momento de contracción violenta de la economía. Que los que tienen más tengan carga más pesada, pero como ha sido diseñado, el impuesto va a ser todo lo contrario”.
El académico destacó que este “nuevo impuesto, uno de los tantos que tiene el país”, también alcanzará a “un montón de empresas medianas como pueden ser hoteles, cadenas pequeñas de supermercados, contratistas del Estado. Hay que ver cómo están valuados contablemente, fiscalmente estos activos; si es un comerciante de grandes superficies le puede ocurrir. Estas empresas medianas son entre el 2,5 y el 4 por ciento de las empresas privadas argentinas, pero son entre el 25 y el 30 por ciento del empleo”.
Por esa razón, Vassolo apunta que “esto le pega a todo el empleo privado, y afecta a los sindicatos. Argentina tiene una de las presiones impositivas más altas del mundo, y a este impuesto lo cobran solo cuatro países. Lo que va a pasar hará quebrar empresas o que se achiquen al pagar impuestos, hay pymes que están huyendo y se van a Paraguay”.
En este contexto, reconoce que las opciones de muchos serán “vender patrimonio para pagar el impuesto”, “no pagar y esperar una moratoria”, o la mencionada de “hacer las valijas e irse a otro país latinoamericano más amigable con la empresa”.
Finalmente, sostuvo que la iniciativa va a “frenar mucho la recuperación del empleo”, por lo que la recuperación ante la recesión será más difícil. Por lo tanto, apunta a que se puedan hacer modificaciones antes de su aprobación final. “Tengo alguna esperanza que se pueda hacer algo para frenarlo por parte de las fuerzas políticas”, concluyó.
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