Hace algunos días fue informado que la Sociedad de Comerciantes, Industriales, Propietarios y Afines de Pilar (SCIPA) conformó la Subcomisión de Gastronomía y Hotelería integrada por algunos de los más importantes locales gastronómicos y hoteleros “con el claro objetivo de dar una mayor representatividad en nuestro partido y generar un puente entre nuestros representados, acercando sus necesidades y reclamos a las autoridades locales”.
La Subcomisión logró reunirse con la Unión de Trabajadores de Turismo, Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA) en la cual dialogaron de la situación que atraviesa el sector, las deudas generadas y cómo saldarlas. “Lo que hemos logrado, que aún no está firmado, es con el sindicato que la cuota sindical de abril a septiembre del año pasado, será condonada y los ítems de este año nos harán un valor histórico, quita de intereses y facilidades de pago. Está hablado con el secretario de Gastronómicos”, contó José Luis Mastellone, titular de la Subcomisión, a Resumen.
Mastellone destacó el trabajo que se está realizando y pidió a todos los gastronómicos que se acerquen porque “es un beneficio para todos, cuantos más seamos, vamos a poder lograr más cosas”.
Asimismo apuntó a que han pedido una reunión con la Comuna por el pago de la tasa Seguridad e Higiene, Publicidad y otros ítems. “Primero, cerraremos lo del sindicato, que será la semana que viene. Tenemos planeado la reunión con el Municipio, se ha hablado de manera informal”, dijo Mastellone.
El gastronómico confió en que el Ejecutivo local será receptivo a lo que plantean y que, en conjunto, podrán encontrar una solución: “en reuniones que hemos tenido con Santiago Laurent, nos planteaba que si había ayudas, lo harían. Creo que serán receptivos, siempre nos recibieron, no nos han dado siempre lo pedido pero ellos deben cumplir con sus obligaciones y los protocolos que les enviaban pero sí, siempre hubo buena predisposición por parte del Municipio”.
Es que la situación de los gastronómicos en los últimos tiempos ha sido crítica: durante el 2020 permanecieron cerrados por la pandemia del coronavirus y, si bien ahora han podido retomar sus actividades, aún las ganancias no alcanzan para cubrir los gastos. “Hay que dividir en dos, tres etapas. Primero, cuando arrancamos no podíamos atender adentro, muchos colegas no tenían lugar al aire libre y no era redituable. Luego, pasamos al 30 por ciento de aforo, ahora con el 50 y con el tema de vacunas, se puede llegar a 70 por ciento. El horario, que fue desde las 22, a las 23 y a las 0. Hay que remontar todo lo atrasado, que es grande”, dijo.
“En Pilar las vacaciones de invierno fueron un veranito, subió el trabajo pero no alcanza con eso. Estamos complicados, mucha deuda que pagar pero estamos mejor que el año pasado. Hay establecimientos que cerraron, que no pudieron soportarlo y eso nos preocupa, porque quedó mucha mano de obra dando vueltas”, añadió.
Respecto del aforo adicional (del 20 por ciento) para consumidores que estén vacunados, el propietario del restaurante 1888 había comentado anteriormente que su aplicación sería engorrosa. “Dije que era engorroso, pero les consultamos a los clientes. A muchos los conocemos, son habitué y ya nos dicen que están vacunados. Pero sí, al tomar temperatura, los datos, consultar si está vacunado, explicarle el horario de que se vaya, es mucho pero tratamos de llevarlo”, cerró José Luis Mastellone.
Dejar un comentario