Automóviles siniestrados, móviles policiales y un gran caos caracterizan la calle Tucumán, a la altura de la Comisaría Pilar 1ª. Las soluciones, tardan en llegar.
No es novedad el caos de tránsito que se genera en la puerta de la Comisaría Primera de Pilar. El sector, en pleno centro de la ciudad cabecera del distrito, es altamente transitado por la cantidad de entidades bancarias afincadas en la zona, junto a numerosos comercios, las oficinas judiciales y municipales instaladas en el Edificio de Bomberos y por la cercanía con la plaza principal de la ciudad.
Pero poco favor le vienen haciendo desde hace muchos años las autoridades policiales, que no han solucionado la disposición de autos siniestrados a las puertas de la comisaría, donde hoy hay cerca de 15 vehículos, en total estado de abandono y generando gran suciedad, ya que los barrenderos poco pueden hacer para mantener limpia la zona.
A esto se suma el movimiento constante de patrulleros, como así también el desapego a las normas de tránsito de los uniformados que estacionan permanentemente autos privados y móviles en doble fila durante largas horas al día. De la misma forma, los móviles de la Guardia Urbana quedan allí, estacionados obstruyendo el libre tránsito y circulación.
Tiempo atrás se trasladó el movimiento de colectivos hacia Ruta 8, sin embargo poco ha cambiado en la zona, donde también se ve poco control de los inspectores de tránsito.
Vale agregar que la avenida Tucumán entre Rivadavia e Ituzaingó además dispone de pocos lugares para el estacionamiento ya que gran parte está reservada para la comisaría como para empleados judiciales y camiones de transporte de caudales, dejando libre para el uso particular, menos de 50 metros en ambas veredas.
Dejar un comentario