En el aniversario del Río Luján, ambientalistas vuelven advertir sobre la consecuencia de las obras

Indicaron que los cambios que producirán los trabajos afectarán toda la dinámica de la vida que acoge el río en sus aguas y humedales. Además, volvieron a remarcar que las obras son “ilegales”, por la falta de audiencias públicas.

En el año 2017, la Legislatura de la provincia declaró al 4 de noviembre como el Día Provincial del Río Luján, en honor a la travesía realizada por 150 embarcaciones en el año 1993, con el objetivo de visibilizar el río y concientizar acerca de la necesidad de recuperar su uso para la sociedad.

Hoy, en un nuevo aniversario del río, desde la Asociación Patrimonio Natural de Pilar vuelven a poner el foco en las obras que se llevarán a cabo en el cauce, advirtiendo una vez más las graves consecuencias que podrían acarrear, y se preguntan si “se acerca la destrucción tan temida”.

“El año pasado, en el anterior aniversario del río, decíamos nada para festejar. Este año, expresamos que nos embarga el dolor porque se acercan las obras que definitivamente destruirán el río y parte de sus humedales. Con una operatoria hidráulica aberrante, que trata a los ríos como si fueran meros caños, el Ministerio de Infraestructura de la Provincia iniciará en breve el ensanche y rectificación del río a los que llama eufemísticamente ‘adecuación del cauce’. Casi el 40 por ciento de éste sufrirá este cambio”, aseguran, y manifiestan que “toda la dinámica de la vida que el Río Luján acoge en sus aguas y sus humedales se verá afectada”.

Por otra parte, quienes han apoyado la causa desde el distrito, uniéndose a vecinos y grupos ambientalistas de localidades vecinas, afirman: “Lo grave de esta situación es que nunca se intentó, previo a cualquier obra hidráulica, eliminar alguna de las causas de las inundaciones como son los canales clandestinos que desagotan el agua de los campos y la envían al río, y que fueron denunciados a la Justicia. O recuperar humedales literalmente robados al dominio público y rellenados por varios barrios cerrados que obstruyen el escurrimiento del agua”.

Y agregan que “además, se ha modificado el orden y número de obras originalmente previsto en el Plan, lo que abre la posibilidad que el agua se saque de la cuenca media (Luján) para que se acumule en la cuenca baja (Pilar, Campana, Escobar)”.

En tanto, una vez más se plantea que “estas obras hidráulicas son ilegales”, ya que “la obligación del Estado provincial de llamar a audiencias públicas nunca se realizó, y el espacio de participación pública que está previsto en la ley, de creación del Comité de Cuenca del río Luján, nunca se concretó”.

Finalmente, se le suma al cuadro de preocupaciones que “vecinos de Pilar están denunciando que la empresa encargada del dragado de los barros del río -muchos contaminados con sustancias provenientes de actividades industriales- se los está ofreciendo para poner en los fondos de sus casas. Dada su peligrosidad, estos barros requieren un tratamiento especial, por lo que está actitud resulta criminal”. “Querido Río Luján, esperemos que este no sea el último aniversario tal cual hoy te conocemos”, cerraron.