Durante el fin de semana, el Municipio volvió a salir a las calles para realizar controles en el marco de las medidas contra la pandemia de Covid-19. En este caso, orientados a bares y restaurantes, quienes cuentan con el permiso para trabajar bajo determinadas reglas, principalmente apuntando a una actividad con mesas al aire libre, reduciendo así la posibilidad de contagio.
Sin embargo, pese a la expresa prohibición de prestar servicios en el interior de sus establecimientos, durante los operativos llevados a cabo se procedió a la clausura preventiva de dos locales gastronómicos en los que se constató la presencia de comensales en el interior de los mismos.
Las medidas fueron tomadas en un local de sushi, por el Cuerpo Único de Inspectores, dependiente de la Secretaría Legal, Técnica y de Control del Municipio, durante una inspección que llevó a cabo en Pisco y colectora de Panamericana. En la misma, el personal corroboró la atención a clientes en el interior. Este hecho incumple gravemente la normativa vigente para el funcionamiento de los locales gastronómicos y constituye una infracción al decreto municipal establecido en el marco del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio para cuidar la salud de los vecinos.
Además, en el transcurso del operativo el personal a cargo del mismo corroboró la falta de habilitación municipal correspondiente para el funcionamiento de este local gastronómico, conforme a la documentación requerida por los Bomberos de Pilar. Por este motivo, además de la clausura preventiva, se realizó una infracción.
Por otra parte, en otro recorrido del Cuerpo de Inspectores, en este caso en locales sobre Las Magnolias, se constató la presencia de clientes en el interior de un restaurante ubicado en el complejo Ibis, hecho que incumple las mismas normativas que el caso anterior. En esta oportunidad también se registró la falta de los papeles que solicitan los Bomberos para abrir sus puertas.
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