El camino a Estancias del Pilar, el punto de conflicto entre countries y la empresa desarrolladora

El camino a Estancias del Pilar se ha vuelto, para los miles de conductores que lo transitan a diario, una gran odisea. Con 7 kilómetros de extensión, el mismo une a los barrios privados de la zona con la Autopista Panamericana, pero sus baches, mala iluminación y falta de señalización han generado disconformidad entre los vecinos.

Javier Sánchez de la Puente, presidente de Estancias del Pilar, afirmó que “El camino es intransitable”. “Casi diariamente circulan 20 mil personas. Además de haber una escuela y espacios de deportes, una línea de colectivos pasa por ahí. Estamos muy preocupados. Hace tres años que está así”, sostuvo según consignó La Nación.

A lo largo del camino hay baches, falta de faroles de iluminación y escasa señalización que los ponen en peligro constante. “Ya hubo dos vuelcos en esa vía”, dijo Sánchez de la Puente.

El conflicto está en quién recae la responsabilidad de los arreglos. Es que el camino fue realizado en 2001 por la empresa Urbanizadora Estancias del Pilar, que tiene los derechos de administración y realizaba los mantenimientos. Los barrios privados Estancias del Pilar y Pilará, dos de los primeros en radicarse en la zona, debían asumir los gastos de preservación.

Recientemente el conflicto entre las partes llegó a su punto máximo y, lamentablemente, el camino ha sido abandonado. “Por estatuto, Estancias del Pilar y Pilará son los que deben absorber el costo del mantenimiento”, dijo Esteban Zorraquin, director de Urbanizadora Estancias del Pilar.

Por su parte, Sánchez de la Puente afirmó que la compañía “presentaba facturas y cargos difíciles de sostener. Luego lo dejó de mantener”.

La situación perjudica, además de a los dos countries mencionados, a El Ocho, Openn Pilar, Pilar Chico, Alcanfores, Estancias del Río y Ombúes.

Ante la falta de respuestas, lejos de quedarse con los brazos cruzados, los vecinos tomaron el toro por las astas y decidieron realizar reparaciones ellos mismos. “Es un camino privado y pueden ser penalmente responsables si algo pasa”, explicó Sánchez de la Puente.

“Dos veces estuvimos por firmar un acuerdo. Íbamos a hacer un fideicomiso de administración para que sean los barrios los que se encarguen. Sin embargo, Zorraquin salió luego con un domingo siete y nadie quiso firmar”, dijo y sumó que la empresa “solo acepta si ellos administran el fideicomiso, pero ningún vecino quiere pagar si es así”.

Sin embargo, Zorraquin –director de la compañía– planteó que “al no haber aportes privados, está en ese estado”. “Desde fines de 2022 se hizo insostenible mantenerlo sin el pago de los vecinos. Ellos pretenden que se convierta en algo de uso público que no requiera pago y sin que medie entre las partes una vía institucional”, comentó.

Mientras tanto, los vecinos aseguran que las facturas declaradas por la compañía eran “irrisorias”. “Nuestro anhelo es que Zorraquin ceda los derechos sobre la administración del camino”, dijo Sánchez de la Puente.