La crisis social y económica se hace sentir cada vez más y los bolsillos de los pilarenses sufren día a día la imposibilidad de no solo llegar a fin de mes, sino de adquirir bienes y servicios básicos debido a sus grandes aumentos.
Para los comercios de Pilar la situación también se ha vuelto cada vez más difícil debido a que la baja en el poder adquisitivo de los vecinos se traduce en escasas ventas. En el mes de febrero, sin ir más lejos, las ventas tuvieron una estrepitosa caída.
Según el relevamiento de la Cámara de Comercio e Industria de Pilar (SCIPA) las ventas minoristas en febrero, en comparación con febrero del 2023, cayeron en un 29,17 por ciento.
SCIPA, a través de un comunicado indicó que la cámara “expresa la inquietud por la alarmante caída de las ventas minoristas” y que esta caída “impacta negativamente en la recaudación fiscal y privada”.
“La alta preocupación del sector se intensifica ante el incremento desproporcionado de alquileres, servicios e impuestos, agravando la situación para el comercio local. Esta disparidad, sumada a una
En el caso de los rubros, el más afectado fue Bazar deco y muebles, que registró una caída del 49 por ciento. Seguido se registró el rubo Librería, con una baja del 39 por ciento, luego Materiales para la construcción con una caída del 38 por ciento, seguido de Alimentos que cayó en un 34 por ciento.
Los rubros de Perfumería y Venta de alimentos elaborados, ambos cayeron en un 32 por ciento. Calzado y marroquinería, registró una baja del 30 por ciento mientras que Ferretería e insumos de servicios, cayó un 29 por ciento al igual que Servicios para la Construcción.
Cerrando la lista, el rubo de Textil e indumentaria registró una baja del 22 por ciento, Gastronomía y bares bajó un 10 por ciento y Pañalera y artículos infantiles, un 6 por ciento.
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