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El Municipio les había prometido que, de no estar en ninguna de las dos compañías, tendrían empleo en la Comuna. Sin embargo, la promesa no se ha cumplido y el miércoles fueron desafectados 40 trabajadores de distintas áreas.
La transición entre Sudamericana de Aguas y AySA, que culminará el 1º de julio cuando la compañía que abastece a Escobar y Garín se haga cargo de nuestro distrito, ha dado que hablar desde su anuncio. Sin embargo, luego de las quejas por la falta de trabajos realizados, el traspaso de compañía ahora enfrenta un nuevo capítulo: la desafectación de un gran número de empleados.
A pesar de lo expuesto por la Comuna respecto de que se conservarían los puestos de trabajo, ya sea en AySA o en el mismo Municipio, recientemente algunos empleados han comenzado a denunciar que han sido despedidos. “Nos habían dicho que nadie se iba a quedar sin trabajo, que entre Sudamericana, AySA y el Municipio nos iban a absorber, pero nos echaron. Nos dieron la noticia ayer, porque hasta último momento nos aseguraban que todos tendríamos trabajo”, dijo Johanna Ventura, una de las empleadas, a Resumen.
Por otro lado, Samanta Pecar, empleada durante 18 años, declaró a Resumen que las promesas por parte del Ejecutivo no fueron cumplidas: “se nos había prometido que nadie del personal iba a quedar sin trabajo. Ayer nos echaron, a cerca de 10 administrativos y cerca de 30 de servicios”. Al mismo tiempo Pecar comentó que un grupo de empleados quedará con Sudamericana mientras la firma continúe con los contratos con aquellos barrios que están fuera de la concesión.
La noticia fue recibida por ambas empleadas con desconcierto y tristeza, puesto que ambas aseguraban que la promesa de que todos aquellos que no quedaran para ninguna de las dos empresas, pasarían a trabajar para la Comuna. “Nos quedamos sin trabajo, fue un día horrible, de tristeza y llanto. A nadie le gusta estar sin trabajar y enterarnos así, es duro. Quedarte sin nada de un día para el otro. Nos dejaron en la calle”, comentó Ventura.
Pecar, por su parte, afirmó que se encuentra en un estado de tristeza y desilusión por quedarse sin trabajo y por no haber sido informados correctamente. “Quedarte sin trabajo te afecta. Sentir que el manejo no fue idóneo, el no informarnos realmente qué pasaba porque nosotros confiamos en lo que dijeron, que todos tendríamos trabajo, eso no pasó y estamos muy mal. Nos molesta la mentira, el Intendente hizo política con el traspaso. Desde el día cero, todo el mundo sacó su tajada y hacer política con la gente que se queda sin empleo, no está bien”, relató la ex empleada.
En total cerca de 50 empleados de Sudamericana pasarán a formar parte de la planta de AySA mientras que el resto ya se ha acercado al Ministerio de Trabajo para averiguar sobre las liquidaciones que les corresponden y las indemnizaciones. Mientras que Johanna Ventura explicó que no solo irán al ministerio sino que hablarán con la Comuna para recibir explicaciones de lo ocurrido ante la falta de cumplimiento de su promesa, Samanta Pecar afirma que ya ha perdido las esperanzas de que se les otorgue un empleo. “No tengo esperanzas, porque si no pasó en su momento cuando esto se gestaba, no creo pase ahora. Sudamericana indemnizará a sus empleados y no creo que el Municipio se haga cargo, teniendo en cuenta que la planta estatal se está achicando”, cerró Pecar.
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