El Gobierno provincial habilitará en esta nueva etapa del aislamiento la construcción privada ampliada, mientras que se analiza por estas horas el posible funcionamiento de los bares al aire libre, con “mesas afuera” y estrictos protocolos. También, por primera vez, están en agenda los gimnasios en el AMBA, aunque posiblemente esa reapertura se dé más adelante.
Como vienen afirmando las autoridades sanitarias, la situación está estabilizada hace al menos cinco semanas en los municipios que integran el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Si bien se insiste con la “meseta alta”, los casos comenzaron a bajar lentamente y el sistema sanitario logró un impasse, y ya no hay peligro de saturación.
El ministro de Salud, Daniel Gollan, volvió a hablar ayer de un “descenso significativo” en la utilización de camas por COVID en el AMBA y sostuvo que está mejorando aún más la gestión de camas de terapia en toda la provincia.
Según trascendió, en la reunión que encabezó ayer con intendentes, el gobernador Axel Kicillof planteó un cronograma de aperturas semanales que viene atado a la baja progresiva de casos de coronavirus. La clave será afinar la convivencia social bajo estrictos protocolos, lo que también será fundamental de cara a la temporada de verano.
“Vamos a seguir trabajando en base a protocolos estrictos y estudiando las distintas actividades que se pueden habilitar en las fases en que se encuentre cada municipio”, planteó ayer Kicillof, quien subrayó “la necesidad de reforzar el cumplimiento de los protocolos”.
Respecto a la ampliación en la habilitación de la construcción privada, la actividad que ya tiene el visto bueno de la Provincia, fuentes de gobernación indicaron a DIB que “hasta ahora teníamos, obras chicas con movilidad propia y no más de 15 personas. Y obras grandes que corran peligro de derrumbe”. La idea ahora es ampliar el concepto, “con más trabajadores, pero cumpliendo protocolos más estrictos”.
Este dato es fundamental si se tienen en cuenta las recientes cifras del Indec respecto al rubro. La industria de la construcción registró en agosto una caída interanual del 17,7%, lo cual implica una desmejora frente a los datos de junio y julio, cuando las bajas fueron de 14,8 y 12,9%, respectivamente. Además, la construcción mostró una baja mensual frente a julio del 1%, lo cual quiebra la racha positiva que tuvo en el último trimestre en relación al período inmediatamente previo. El acumulado de los ocho meses presenta una disminución de 31,8% respecto a igual período de 2019.
En relación a los bares, la habilitación no está confirmada. “Estamos cerrando detalles”, señalaron desde Gobernación. En caso de funcionar, la modalidad será al aire libre. “No estamos pensando en nada adentro”, indicaron. Mientras que podría ser una especie de Take Away Plus, con la posibilidad de ocupar una mesa afuera, pero sin el servicio de mozos. (DIB)
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