![]()
La lentitud en la atención y el amontonamiento de vecinos fueron el común denominador desde el inicio de la jornada. La situación del resto de los bancos.
La de hoy no fue una mañana de las más tranquilas en el distrito. Es que muchos vecinos se acercaron a los bancos para retirar dinero y, en vísperas de las fiestas, el panorama fue caótico: en el Banco Provincia fue donde mayor malestar se generó, ya que un nutrido número de personas comenzó a hacer la fila a las 7.00 y no solo tuvo que soportar el lento ingreso hacia el interior de la entidad, sino también el avance de una segunda formación que comenzó a formarse en dirección contraria.
“Estamos desde temprano y se formó una fila, pero empezaron a hacer otra; dicen que es para informes y en realidad es otra clásica viveza argentina. A quienes están del otro lado, incluso, los atienden antes”, expresó a Resumen con malestar un vecino luego de más de tres horas de espera. Como él, los casos se repetían y, por eso, se exigía la presencia policial para calmar la situación.
Es que, como si hiciera falta, avisaron que si no había alguien custodiando la puerta del banco “ya se hubiera metido un montón de gente”. Por eso, ante la falta de respuestas, explotaron: “Hace cuatro horas estamos. La seguridad se tiene que hacer cargo, debería haber una sola fila, se están colando”, empezó a gritar un grupo de vecinos en medio de continuos aplausos.
Algo similar pasó en la sucursal del Provincia en Derqui, ya que el ambiente se había puesto agresivo y, ante la ausencia de efectivos policiales, desde el banco decidieron cerrar las puertas. En otras entidades bancarias la situación, aunque con matices, no fue muy distinta. En el Nación, muchas personas esperaban su turno para acceder al sector de cajas y las demoras empezaron a generar molestias.
“Tienen que ordenar las filas. Hay mujeres embarazadas o con nenes chiquitos, gente grande con dificultad, como yo que estoy hace dos horas, y no puede ser que esperen tanto tiempo bajo el sol para cobrar una miseria de jubilación después de haber trabajado toda la vida”, sostuvo, enojado, un jubilado.
Sobre la calle Tucumán, pero en la cuadra del banco Credicoop, la fila no era importante pero el retraso subsistía. Quiénes estaban esperando coincidían en que, si bien afuera no se replicaban situaciones similares a las que se vivían en el Banco Provincia, el conflicto estaba adentro. “Avanza rápido pero el problema es que la gente quiere sacar plata, en los cajeros no hay y tienen que ir todos por caja”, afirmaron.
Dejar un comentario