El año pasado y debido a la pandemia, la demanda de alquileres en barrios privados del Conurbano marcó récords, y si bien el escenario se plantea diferente para este verano, se mantiene un buen caudal de consultas que ya han comenzado.
Escapar del ritmo de la Capital Federal, encontrarse con los espacios verdes, una pileta y aún mantener la cercanía para responder a algún compromiso laboral, son los factores que se suman para que el alquiler de una vivienda en algún country de la zona siga teniendo un alto atractivo para muchas familias.
En ese marco, diferentes inmobiliarias indicaron que “hay un gran nivel de interés, principalmente para diciembre y enero”. Tal como explicaron, hay aproximadamente un 20 por ciento menos de demanda que el verano pasado, pero teniendo en cuenta que el nivel de reserva del último enero marcó el pico máximo de los últimos años, la actual demanda no parece estar nada mal.
El requisito base de las consultas es una propiedad con pileta y buena conexión a internet para aquellos que más allá del descanso también mantienen un trabajo a distancia. Pero saldar esas demandas tiene su precio, y los propietarios apuntan a alquileres en dólares billete.
“La zona más buscada es la del complejo Villanueva, ubicada en Benavidez y Tigre. Y le siguen opciones como Nordelta, Pilar y Escobar”, detallaron. Y respecto del promedio de alquiler que se maneja para el mes de enero, aseguraron que comienzan entre los 3.000 y 5.500 dólares para una casa estándar, mientras que los barrios más exclusivos parten desde los 5.000.
En la particularidad, el distrito no sale de esos márgenes, y así lo explicó Miguel Di Maggio, director de la inmobiliaria Depa, en un informe de La Nación. Estiman que en la zona de Pilar hay que calcular unos 3.000 dólares para una quincena de enero, mientras que para el mes entero se deberá contar con 5.000. “Si bien puede haber opciones más económicas, el promedio son esos valores”, aseguró.
Aunque admitió: “La mayoría de los propietarios arrancan pidiendo los dólares, y con los dólares en la mano uno puede negociar el precio”. Según destacó, a medida que se acerca el verano también van apareciendo renegociaciones y muchos alquileres pueden terminar siendo en pesos.
De esta manera, aquellos que opten por pasar un mes de descanso en el distrito deberá disponer de 520.000 pesos para el alquiler de una vivienda, solo si se tiene en cuenta el valor oficial de cambio. En tanto, si se piensa en términos del dólar paralelo, debemos hablar de 930.000 pesos para disfrutar el verano en Pilar.
Dejar un comentario