El Presidente insistió que frente a la crisis, "este es el camino, no hay otro". Por otro lado, afirmó que se debe terminar con la creencia de “que somos muy vivos viviendo de prestado, de gastar más de lo que tenemos”.
Acompañado por el titular de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Dardo Chiesa, Macri pidió la "solidaridad" de los "hombres de campo" durante la turbulencia económica. "Dada la emergencia les he tenido que pedir a todos los que tienen mayor capacidad en la sociedad, los que hoy pueden exportar, este último esfuerzo temporal de un impuesto que es malísimo, perverso, que va en contra de lo que queremos, que es desarrollar cada economía regional y creando empleo privado de calidad", dijo el mandatario, sobre el impuesto a las exportaciones anunciado la semana pasada.
"Esto tiene que ser para acompañar una transición donde tenemos que terminar con 70 años de engaños, de frustraciones, de no enfrentar la realidad, que nos ha llevado a creer que somos muy vivos viviendo de prestado, de gastar más de lo que tenemos, de crear impuestos distorsivos", agregó.
De todas formas, y tras hablar de "tormentas externas y algunas internas", insistió con la necesidad de "mantener el rumbo" porque "este es el camino". De esta manera, buscó acercar posiciones con el sector agropecuario luego de los cambios de las retenciones, lo que le valió fuertes críticas, entre ellas la del propio Chiesa que estaba junto a él en el escenario.
Con tono conciliador, Macri puso énfasis en reiteradas ocasiones en la importancia del sector para el crecimiento de la economía, habló de "la gran familia del campo que entiende la importancia de la cultura del trabajo, del esfuerzo, de superarse".
Así, dijo que el Gobierno quiere "sembrar una nueva Argentina, sembrarla de raíz", para lo que, primero hay que "preparar el terreno, desmalezar. Y desmalezar es sacarnos de encima la resignación, las trabas".
El mandatario también resaltó la necesidad de "profundizar el diálogo" con todos los sectores y "dejar de pensar que las Pymes son buenas y las grandes empresas con malas". Así, resaltó la importancia de las mesas de productividad que impulsó el Gobierno desde 2016, a las que calificó como "una maravilla".
"El mundo nos está mirando como nunca antes. Es el momento en que tenemos que demostrar que acá estamos, que somos, que de verdad aprendimos y crecimos y que no vamos a seguir repitiendo los mismos errores. Es hoy, es aquí y es ahora. A poner todo lo que tenemos porque esta vez sí va en serio", concluyó.
Vale recordar que en soja se redujo del 25,5 al 18 por ciento la tasa de retención, pero se aplicó un tributo adicional de 4 pesos por dólar exportado. Ese tributo extra lo tienen también el trigo y el maíz. En tanto, productos como la carne y la leche deben pagar 3 pesos por dólar exportado.
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