En un contexto económico cada vez más desafiante, un reciente informe del Observatorio de Tarifas y Subsidios del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), dependiente de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el Conicet, ha revelado cifras alarmantes para las familias del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Según el estudio, las familias necesitaron más de $140.000 en julio para cubrir los costos de los servicios públicos esenciales, lo que representa un incremento del 374% en comparación con diciembre de 2023.
El análisis detallado destaca que un hogar promedio en el AMBA requiere exactamente $142.645 para solventar sus necesidades energéticas, de transporte y de agua potable durante el séptimo mes del año. Este aumento drástico se debe a diversas actualizaciones en las tarifas de transporte, energía eléctrica, agua y gas natural que se han implementado en diferentes meses del año.
En particular, el informe subraya que el gas ha experimentado el mayor incremento con un 1.208% desde diciembre pasado, convirtiéndose en el principal responsable del aumento en la tarifa final y en la canasta de servicios públicos. Además, otros servicios como el agua potable y cloacas han subido un 249%, la energía eléctrica un 229% y el transporte un 410%.
Impacto estacional y ajustes tarifarios
El reporte también señala que en julio se observó un incremento del 2% en el gasto total en servicios públicos. Este aumento es atribuible a un consumo más elevado de gas natural y energía eléctrica debido al pico estacional del invierno, así como a los incrementos de precios implementados a partir del 1° de junio. La modificación de los bloques de consumo subsidiado en energía eléctrica y gas natural, vigente desde la misma fecha, ha contribuido igualmente a esta suba.
Con los valores actuales, la canasta de servicios públicos del AMBA representa en julio el 15% del salario promedio registrado estimado del mes. Es relevante destacar que el gasto proporcional de cada servicio muestra cifras similares para el transporte, la energía eléctrica y el gas natural.
La postergación de los aumentos en las tarifas de luz y gas decidida por el Gobierno ha influido en los datos de este mes, con el objetivo de contribuir a la reducción de la inflación tras las subas aplicadas en junio.
El estudio del IIEP concluye que, en promedio, los hogares del AMBA de distintos niveles de ingresos pagan tarifas que cubren el 41% de los costos de los servicios públicos, mientras que el Estado subvenciona el 59% restante. No obstante, esta cobertura es dispar entre diferentes hogares y servicios, lo que pone de manifiesto la complejidad y las desigualdades en la prestación de estos servicios esenciales.
Esta situación refleja la creciente presión económica que enfrentan las familias del AMBA, resaltando la necesidad de medidas gubernamentales y políticas públicas que aborden de manera efectiva los desafíos de costos y accesibilidad a los servicios públicos.
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