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Se creó un panorama polémico en torno al caso luego que el juez Silvio Carzoglio rechazara la detención del líder camionero. Se hicieron públicas la guerra mediática y denuncias por carpetazos.
Luego que el juez Silvio Carzoglio rechazara la detención del vicepresidente de Independiente y líder camionero Pablo Moyano en el marco de la causa donde lo investigan por presunta asociación ilícita en ese club, una fuerte disputa en la Justicia bonaerense volvió a primer plano. Denuncias de carpetazos, avances en jury de enjuiciamiento y guerra mediática salieron a la luz y prometen un final incierto.
Es que Carzoglio, quien rechazó el pedido del fiscal Sebastián Scalera para que Moyano vaya preso, denunció no sólo amenazas telefónicas sino que apuntó contra el procurador bonaerense, Julio Conte Grand, quien salió a rechazar "las presiones y los carpetazos" que le atribuyeron al organismo que comanda.
"No me van a correr con aprietes", dijo Carzoglio al apuntar contra algunos medios y relacionó las amenazas con que se filtró la resolución en la que rechazaba la detención del líder camionero. "La filtración de la resolución se la adjudicó al personal de la fiscalía de cámara de Lomas de Zamora que se llevó el expediente de acá y a los 20 minutos estaba en las redes", sostuvo, y también apuntó contra Conte Grand al que acusó de filtrar datos en su contra. "Soy imparcial, no me voy a dejar influenciar", sostuvo.
Obviamente, quien no dejó pasar esta declaración fue el Procurador al rechazar que desde su oficina se hayan filtrado datos sobre la actividad judicial de Carzoglio, publicados durante el fin de semana en diarios como La Nación y Clarín, entre ellos un pedido de juicio político contra el magistrado.
En este contexto, la secretaría de Control Disciplinario de la Procuración comenzará a evaluar la conducta del magistrado. "Iniciaremos el trámite disciplinario y a su vez pondremos en conocimiento a los fiscales de turno. El señor Carzoglio va a tener que ratificar su denuncia (de carpetazos). Y además se va a iniciar la causa penal, donde va a tener que en primer lugar ratificar la denuncia formalmente, aportar las pruebas y someterse al riesgo de una falsa denuncia", adelantó Conte Grand. Y tras calificar de "inexplicable" el rechazo al pedido de detención de Moyano, agregó sobre la situación de Carzoglio: "Hay tres expedientes disciplinarios que han sido considerados por nosotros para armar el contenido de la denuncia que hicimos para dar inicio al jury de enjuiciamiento".
Sin embargo, la pelea no quedó allí, y el juez de Casación bonaerense, Víctor Violini, salió a respaldar al magistrado de Avellaneda y aseguró que en la causa contra Pablo Moyano "hay una pata política". "A todas luces, no tengo ninguna duda, que aparece la pata política en esa causa", aseguró Violini y apuntó contra Conte Grand, quien fue ministro de María Eugenia Vidal hasta 2016. "En la provincia debería haber división de poderes; no la hay, porque no hay independencia del Poder Judicial, está absolutamente subordinado en el plano económico sino de cómo debe hacerse e interpretarse la Justicia", lanzó Violini a Radio la Red.
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