Tomás Pérez Bodria afirmó que hay “una campaña de desestabilización del gobierno”

El letrado hizo referencia a las acusaciones de la oposición ante la medida de otorgar prisión domiciliaria a ciertos convictos para evitar la propagación del COVID19. Hizo hincapié en el derecho a la salud, la sobrepoblación carcelaria y el personal del servicio penitenciario.

La liberación de convictos se ha convertido en uno de los temas más hablados en estos últimos días. Así, junto con los datos del avance de la pandemia del coronavirus, dicha decisión ha acaparado la opinión  pública, los medios de comunicación y más, con opiniones diversas sobre si es correcto o no otorgar prisión domiciliaria debido al COVID19.

Diario Resumen se comunicó con el reconocido abogado penalista pilarense, Tomás Pérez Bodria para que dé su opinión respecto de la situación y éste afirmó que no solo es importante comprender que el hacinamiento y el virus pueden afectar al servicio penitenciario y sus familias, sino que existe una campaña mediática de la oposición para culpar al gobierno de excarcelar convictos indiscriminadamente.

“En principio es una verdadera estupidez con una intención clara detrás, que es una campaña que se ha armado con la supuesta liberación masiva de presos con fines conspirativos como ha dicho la senadora Beccar Varela. La realidad, es que es muy difícil enfocar seriamente una discusión sobre la problemática de los presos en la provincia y en el país en el marco de esta campaña de desestabilización del gobierno”, explicó Tomás Pérez Bodria durante su charla con Resumen.

Asimismo, argumentó que debe tenerse en cuenta que dicha campaña que menciona está conectada a otros sucesos que han tenido lugar durante el aislamiento como el incumplimiento de las empresas ante decretos presidenciales: “cuando se sacó el DNU de la cuarentena para combatir la pandemia, se sacó conjuntamente la imposibilidad de tocar los salarios de los trabajadores afectados por la imposición gubernamental y prohibiendo los despidos. No pasaron dos días de aquella disposición que el señor Rocca de Techint despidió 1450 trabajadores”.

“La CGT y la Unión Industrial, de la misma forma, han hecho un acuerdo para bajar los salarios en un 25 por ciento pese al decreto inicial del gobierno. Hay una campaña desestabilizadora de la derecha argentina, del macrismo residual para atajar la discusión de poder en la que debe inscribirse el gobierno. Uno de los principales efectos de la pandemia, es que cambiará la estructura de poder, de relaciones laborales”, argumentó el letrado.

En la misma línea, expuso que la economía mundial ha caído abruptamente y que ha quedado al descubierto que los sistemas de salud del mundo “son endebles” y que “se ha legitimado la función del estado, que es el único que puede resolver todo esto, deslegitimando los paradigmas del capitalismo neoliberal que estábamos viviendo”.

Debemos recordar que la persona está condenada a prisión, no a pena de muerte”

“Las disputas de poder se retraen a los estado-nación, los dueños del poder empiezan a discutirlo dentro de los estados y en la Argentina esto pasa. Veníamos con la economía destruida y esta situación, de abrir la posibilidad de una disputa de poder habiendo accedido al gobierno con una ideología nacional y popular, alerta a los dueños de poder, anticipan esta disputa y quieren evitar que en el medio del mayor aval que tiene el gobierno por la adecuada atención a combatir la pandemia, empiece a avanzar en la toma de medidas indispensables para cambiar las relaciones de poder a la salida de la pandemia, como la necesidad de estatizar los servicios públicos”, añadió Pérez Bodria.

Su opinión personal de la medida

El abogado reiteró que se trata de “una campaña infame con un supuesto plan de liberación de presos, sobre todo en Buenos Aires, que es una verdadera locura” y explicó que en muchos países han otorgado la prisión domiciliaria a convictos debido a la pandemia.

“Creo que no otorgar la prisión domiciliaria en ciertos casos es criminal. La Organización Mundial de la Salud y la ONU han establecido la necesidad de llevar adelante estas domiciliarias para evitar que la pandemia se extienda. En Nueva York la pandemia se potenció luego de que el virus entrara en cárceles y geriátricos”, comentó el letrado.

Asimismo, detalló que en los últimos cuatro años se aumentó considerablemente el número de convictos, pero que no se trata de “presos importantes”: “son pequeños dealers, consumidores. Eso ayudó a que haya una sobrepoblación que ha hecho invivible la vida en la cárcel donde hay todo tipo de enfermedades. La tuberculosis se potenció en grados extraordinarios”.

Creo que no otorgar la prisión domiciliaria en ciertos casos es criminal”

“Qué pasará con el servicio penitenciario, si entra el coronavirus, porque no están privados de su libertad, salen al exterior. Para combatir a un gobierno, se agarran de esto para desestabilizarlo. No es posible avalar científicamente la crítica hecha. Los presos, la sobrepoblación, hay que recordar que más del 50 por ciento de los presos están con preventiva, y hay que aclarar que nadie es culpable hasta que se cuente con sentencia firme”, dijo.

Por último, hizo hincapié en que a pesar de si son o no condenados por crímenes, toda persona tiene derecho a la salud. “Cuando hay una pandemia, la persona aún condenada que, debemos recordar que está condenada a prisión y no a pena de muerte, porque a muchos no les importa la vida de los seres humanos, que hayan delinquido o no, no dejan de serlo. Muchos prefieren que mueran en la cárcel antes que tengan domiciliaria que no solo evite esa muerte sino que encima, se extienda la pandemia”, cerró Tomás Pérez Bodria.