Luego de los reclamos de los diversos sindicatos y el planteo del Estado en relación a la situación que encontraron dentro de la Comuna, se dieron señales de un acuerdo para verificar el legajo de cada empleado en cuestión.
La noticia del masivo cese de contratos por parte del Municipio y en relación a empleados que se desempeñaban con carácter de temporarios estalló luego de las denuncias cruzadas entre los sindicatos que nuclean a los trabajadores municipales y el Estado pilarense.
En ese marco, la jornada del lunes mostró varios escenarios, que comenzaron con una reunión entre referentes de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y el secretario de Gobierno, Santiago Laurent, por la situación de una decena de personas que se desempeñaban en el Centro de Operaciones Municipales (COM); pero a lo que luego se le sumaron denuncias de más de 2.000 desafectados por parte del Sindicato de Empleados Municipales de Pilar (SEMPI) y diversas protestas que además de estos dos gremios incluyeron al Sindicato de Trabajadores Municipales de Pilar (STMP), por ejemplo, en las inmediaciones del propio COM.
Tenemos la responsabilidad de darle respuesta y soluciones a todos los vecinos de Pilar”
Luego, los reclamos fueron subiendo de tono, y comenzaron los anuncios de “estado de alerta” por parte de los gremios, y una asamblea en Derqui donde los trabajadores anunciaron un paro hasta que se reincorporaran a sus compañeros.
Por su parte, la Comuna salió a revelar diversos casos con los que se encontraron al realizar un análisis de las contrataciones área por área. Allí, manifestaron que pudieron ver en múltiples oportunidades “gente nombrada para puestos de alto nivel profesional, sin ninguna capacidad para ejercer su función”, además de encontrarse con un gran número de familiares o personas que respondían a determinado funcionario de la pasada gestión, y muchas veces con nombres que figuraban pero no se presentaban a trabajar desde el 11 de diciembre.
Allí mismo, indicaron que desde enero hasta octubre de 2019, se realizó el nombramiento de 1.333 agentes municipales, lo que implicó un incremento de 112 millones de pesos en cuanto a la masa salarial, que pasó de 231 millones en enero a 343 en octubre, con un aumento del 58 por ciento. Todo, respondiendo a un “entramado político”.
“Responsabilidad y respuesta”
Tras idas y venidas, quien tomó la palabra desde el Municipio fue Santiago Laurent, quien señaló: “Como Gobierno municipal tenemos la responsabilidad de darle respuesta y soluciones a todos los vecinos de Pilar luego de cuatro años de abandono y desidia del gobierno de Cambiemos”.
De ninguna manera podemos sostener la planta política que armó Ducoté para la campaña”
A lo que agregó: “De ninguna manera podemos sostener la planta política que armó Ducoté para la campaña, que escondió en distintas áreas del Municipio y que pagan los pilarenses con sus impuestos. Desde ya, estamos y estaremos en diálogo con los distintos sindicatos que representan a los trabajadores de Pilar para revisar cada uno de los casos, que impliquen situaciones delicadas a considerar, como problemas de salud, o embarazos”.
Finalmente, el SEMPI anunció el acuerdo al que pudieron llegar las partes, señalando: “Por todas las gestiones realizadas canalizando el reclamo en representación de los compañeros trabajadores municipales, informamos que fuimos recibidos por parte del Ejecutivo. Luego de exponer nuestra preocupación por la estabilidad laboral, se abrió un buen canal de diálogo, por el cual el gobierno comunal se comprometió a frenar todo tipo de despido a partir de este momento. También se comprometió a rever todos los casos de despidos revisando los legajos uno por uno”.
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