La consejera escolar se refirió a todos los conflictos surgidos a lo largo de 2018. Reclamó por las obras que no se concretaron, el cierre de cursos y el presupuesto educativo.
Se termina un año duro para la educación, y a la hora de hacer el balance cuesta mucho rescatar algo positivo. Así lo manifiesta la consejera escolar pilarense Rosario Beláustegui, que en diálogo con Resumen aseguró: “Fue un año muy doloroso para la educación, porque primero tuvimos la pérdida de dos compañeros en Moreno, y además, luego tuvimos distintas cuestiones que refieren al cierre de diversas carreras: los bachilleratos, los equipos de orientación escolar, y ahora estamos peleando para que no se cierre el profesorado de Historia y Geografía”.
Por otra parte, indicó que “también vemos que hay un fuerte ajuste en la educación. Que no se ha destinado el presupuesto que estaba prometido. Venimos peleando hace bastante tiempo, porque el 40 por ciento del fondo educativo debería estar destinado a la infraestructura escolar -según una resolución de la Provincia y no por un capricho nuestro- y este año solo se destinaron 15 millones para la infraestructura en escuelas, por lo que nos estamos preguntando qué pasa con los otros 30 millones que faltan, porque no los vemos reflejados en ninguna obra. Pedimos que den explicaciones de cuál fue el fondo que se destinó este año a la educación”.
En ese mismo sentido, contó que “a principio de año se aprobó una ordenanza que era un acta acuerdo entre el Municipio y la Provincia, en donde se mencionaban todas las obras prometidas para el 2018. Eran 19 las que prometió el Municipio, y sólo se hicieron tres, de las cuales una sola se terminó y las otras dos se encuentran en ejecución”.
Beláustegui asegura que la educación “no es una prioridad para este gobierno. Ni para el Intendente ni para Vidal. Está claro y eso se ve cuando miramos el presupuesto destinado a educación, que está muy por debajo de un montón de áreas y es casi la mitad de lo que se destina a los servicios de la deuda. Entonces claramente no es una prioridad para este gobierno”.
Asimismo, expone que no se trata únicamente de un tema presupuestario, “sino que también muchas veces el Intendente no intercede para que no se recorte desde la Provincia. La cuestión del profesorado de Historia y Geografía, si bien es potestad de la Provincia, desde el Municipio avalan ese cierre y la subsecretaria de Educación sale a decir que sobran docentes. No sólo hay un ajuste brutal, sino que aquí también lo avalan”, esgrimió. Y agregó: “Le pedimos al intendente Ducoté que interceda y defienda a los pilarenses de las medidas que se están tomando en educación”.
Finalmente, pensando en lo que ha dejado el 2018, opinó sobre lo que se vendrá sin grandes esperanzas. “Lo primero que pedimos y esperamos, tanto nosotros como los gremios, son las escuelas seguras. Una de las principales cuestiones con las que vamos a insistir, es que el presupuesto esté destinado a los arreglos de gas, electricidad, y cosas que ponen en riesgo la vida de los chicos. Si bien se han hecho algunos, todavía queda mucho por hacer. Esperamos llegar al invierno con esos problemas resueltos. La verdad es preocupante y no queremos otra tragedia como la de Moreno”, concluyó.
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