Hoy se cumplieron seis años desde la muerte de Alberto Nisman, fiscal que investigaba el atentado a la AMIA y fue encontrado muerto en el baño de su departamento de Puerto Madero, luego de haber denunciado a la entonces presidenta Cristina Kirchner (hoy vicepresidenta) y a funcionarios de su Gobierno por un presunto encubrimiento de los acusados del atentado.
A pesar del tiempo trascurrido, la Justicia aún no ha logrado cerrar la investigación que es tratada como homicidio y tiene a cinco acusados: el perito que trabajaba para Nisman, Diego Lagomarsino; y cuatro de sus guardaespaldas.
En este marco, parte de la oposición continúa apuntando a las muchas irregularidades que se vivieron en la escena del crimen, y la vinculación de la muerte con la denuncia contra la actual vicepresidenta y sus funcionarios.
Un ejemplo de ello, es la diputada nacional de la Coalición Cívica, Marcela Campagnoli, quien señaló: “La oposición sostiene lo que siempre dijo, lo de Nisman fue un asesinato. Hubo una deliberada confusión en la escena del crimen. El kirchnerismo necesita ensuciar la cancha. Los jueces necesitan tener carácter para impartir justicia en una investigación tan difícil”.
Y agregó: “Es propio del kirchnerismo querer ensuciar a todos para mostrar que todos somos iguales”.
Asimismo, se refirió a la postura del presidente Alberto Fernández respecto del caso, ya que esta había llamado la atención tiempo atrás, a partir de un documental del caso realizado por Netflix. En él, Fernández aseguró que “hasta el día de hoy, dudo que se haya suicidado”. Sin embargo, durante el 2020, sostuvo que “hasta hoy las pruebas acumuladas no dan lugar a pensar en que hubo un asesinato”. “Como la Justicia va cambiando de acuerdo al momento político, llega un momento donde uno no sabe a quién creerle, el ciudadano común no sabe a quién creerle. En el caso Nisman, yo estoy convencido de que fue un suicidio; no voy a mentir, después de dudarlo mucho”, aclaró.
En ese sentido, Campagnoli lanzó: “Tenemos un presidente ‘secuestrado’. Tiene secuestrada la palabra, se desdice siempre de todo lo que dijo anteriormente. No se puede tener en cuenta lo que dice Alberto Fernández hoy, sí cuando era ‘libre’, sin coacción, y no solo el caso Nisman”.
Y cerró con dureza: “Para un tipo que nunca soñó llegar a un lugar como este, el precio fue garantizar la impunidad. Hay gente con valores y hay gente con precio. Él paga ese precio”.
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