Un intento de toma de un terreno generó momentos de fuerte tensión el sábado por la tarde en el barrio De Vicenzo Grande. La situación fue advertida por vecinos de la zona, quienes detectaron que un grupo de personas comenzaba a instalarse en un predio que llevaba más de un año sin uso y que, anteriormente, había sido ocupado por una empresa de transporte. El movimiento llamó rápidamente la atención de quienes viven en las inmediaciones, que interpretaron la escena como un intento de usurpación.

Ante el avance sobre el terreno, los vecinos dieron aviso a la policía con la expectativa de que la situación pudiera resolverse de manera inmediata. Sin embargo, al ver que el accionar no lograba frenar el intento de ocupación en un primer momento, decidieron intervenir directamente. El clima fue de tensión y conflicto, pero finalmente lograron que las personas que se habían instalado se retiraran del lugar, evitando que la toma se concretara.

El episodio dejó una fuerte preocupación en el barrio. Los vecinos luego de impedir la ocupación comenzaron a recibir amenazas vinculadas a un posible regreso con más gente para intentar nuevamente tomar el predio. Ese escenario generó temor entre las familias de la zona, que manifestaron su inquietud por la posibilidad de que la situación pudiera repetirse.

En diálogo con Resumen, Adriana Cáceres explicó que al tomar conocimiento de lo ocurrido, decidió sumarse a la reunión vecinal realizada el domingo por la noche para acompañar a los vecinos. En ese marco, remarcó que la defensa de la propiedad privada es un tema que viene impulsando desde hace años y recordó que, durante su paso por la Cámara de Diputados de la Nación, presentó un proyecto de ley para endurecer las penas por usurpación, un delito que continúa siendo excarcelable.

Tras ese encuentro, Cáceres y un grupo de vecinos se dirigieron a la Fiscalía con el objetivo de dejar constancia formal de lo sucedido. La intención fue que el intento de toma y las amenazas posteriores quedaran registradas ante la Justicia, entendiendo que este tipo de situaciones deben canalizarse por los mecanismos institucionales y judiciales, aun cuando la ocupación haya sido impedida por el propio accionar vecinal.

Además, Cáceres afirmó que en la Fiscalía fueron recibidos por el fiscal Dr. Camafreitas Steffich. Si bien la denuncia no pudo formalizarse debido a que corresponde a los propietarios del terreno realizarla y a que la ocupación no llegó a concretarse, el fiscal tomó conocimiento del caso y quedó al tanto de lo ocurrido en De Vicenzo Grande. Desde el entorno vecinal señalaron que el hecho de haber informado la situación de manera oficial aportó tranquilidad a la comunidad.

En cuanto al contexto general, Cáceres indicó que durante la pandemia se registraron numerosas denuncias por usurpaciones e intentos de ocupación, muchas de ellas de gran magnitud. Con el paso del tiempo, esos episodios fueron disminuyendo, aunque persiste la preocupación ante situaciones aisladas que vuelven a encender la alarma en distintos barrios del distrito.

El caso ocurrido en De Vicenzo Grande dejó en evidencia el miedo que aún generan este tipo de hechos, pero también la decisión de los vecinos de no permanecer pasivos frente a una situación que consideran una amenaza para la convivencia y la seguridad barrial. Mientras tanto, reclaman prevención, acompañamiento institucional y respuestas claras para evitar que episodios similares vuelvan a repetirse.