Piden que haya un móvil policial en la vivienda que la pequeña de 6 años comparte con su madre y su hermana menor por si el abusador regresa a lastimarlas. “Esperamos lo encuentren pronto”, dijeron.
El caso de la menor de 6 años abusada por su padrastro ha avanzado en la justicia, pero no tanto como lo desearía la familia que el pasado martes se manifestó frente a la fiscalía para solicitarle a la fiscal Carolina Carballido Catalayud que dictara una orden de captura, luego de que el acusado fuese puesto en libertad.
La orden fue conseguida el martes al mediodía, pero hasta el momento el hombre continúa prófugo. “Fuimos a la fiscalía ayer y nos dijeron que después de las 15 dictaban una orden para que podamos ir a Río Luján y Fátima a buscarlo, en todos los domicilios que conocemos, porque hasta el jueves fue visto en la zona”, explicó en diálogo con Diario Resumen, Noelia Cardozo, tía de la menor.
Ahora la familia pide que Romina, madre de la menor –quien además tiene otra hija de 3 años y está embarazada de 3 meses– pueda tener custodia policial en su vivienda por el temor a que su ex pareja se haga presente y las lastime. “Le pedimos a fiscalía, porque ella no tiene seguridad. Con mi otra hermana nos turnamos y la cuidamos. A él no lo encontraron, pero está acá”, dijo.
Asimismo, destacó la importancia de que se realice una búsqueda “más exhaustiva” del acusado debido a que ha sido visto por muchos vecinos: “se lo está buscando, pero algo pasa porque se lo busca con paciencia, y nosotros no podemos esperar porque mientras tanto, la nena no puede ni salir al parque a jugar porque él sigue en libertad”.
Sobre la salud de Romina, su hermana, afirmó que de a poco va mejorando su estado de ánimo. “Está más fuerte que nunca, no quiere parar hasta que haya justicia y que lo encuentren. La nena está con mucho psicólogo”, confirmó Noelia.
[blockquote footer=""]“Nosotros no podemos esperar porque la nena no puede ni salir al parque a jugar porque él sigue en libertad”[/blockquote]
El miedo está latente debido a que en donde viven las medidas de seguridad no son óptimas. “Vivimos en Luchetti y más allá de no tener la patrulla específicamente en su casa, no contamos con luces en las calles. Tenemos un apagón total y hay un monte. Nos desespera, tenemos miedo porque él tiene la mente perversa, puede volver y no sabemos en qué estado, qué puede hacer. No tenemos seguridad de que si está sola, va a estar bien”, comunicó angustiada Noelia.
Su pedido es que la policía pueda ofrecerles un patrullero en la vivienda de Romina para que tanto ella como las pequeñas estén en un ambiente seguro mientras el acusado está en libertad. “Le decimos que trabe las puertas, con muebles, mesas. La verdad es que esperamos que puedan encontrarlo lo más pronto posible”, cerró Noelia Cardozo.
Dejar un comentario