El damnificado denunció lo ocurrido, a pocos metros del Corredor Aeróbico y explicó que hay cada vez más robos en Pilar, haciendo que la gente se acostumbre a los delitos y no denuncie.
El pasado sábado durante la madrugada, delincuentes rompieron los vidrios de un automóvil para robarse el estéreo y las pertenencias que se encontraban dentro. Su dueño, Matías, realizó la denuncia poco después cuando el domingo al levantarse observó la escena frente a su vivienda.
“Me robaron el sábado a la madrugada, cuando me levanté, me encontré con el vidrio roto de la camioneta. Me robaron el estéreo, todo lo que tenía adentro. La semana anterior, incluso, yo había llamado al 911 porque un hombre cerca de las 6.30 había querido abrir las puertas de mi camioneta y de los vecinos”, contó Matías, víctima del robo, a
Diario Resumen.
Hay mucha inseguridad, en todos lados. La gente se está acostumbrando, a que son los chicos de los boliches”
En aquel momento, la policía se acercó a la zona –en la calle Juan Manuel de Rosas, cerca del Corredor Aeróbico– y lograron encontrar a dicho sujeto pero, lo enviaron a su vivienda “porque estaba alcoholizado”: “le pedí que le tomaran los datos o algo, pero bueno, no lo hicieron”.
A la semana, ocurrió el hecho que hizo que este joven denunciara la inseguridad que se vive en el distrito y aseguró que, si bien él ya ha sufrido el robo, quiere alertar de lo que está ocurriendo para que no vuelva a suceder: “si no hacemos nada, seguirán robando, muchos delincuentes están dando vueltas y estamos en el centro de Pilar, no quiero imaginarme en los barrios lo que se está sufriendo”.
Por otro lado Matías contó que se acercó a realizar la denuncia, pero que la burocracia que hay para poder denunciar es cada vez más estresante. “Fui, me dijeron que volviera después, cuando lo hice, me tuve que quedar esperando. Vi muchísima gente entrando a hacer denuncias, de robos de autos, de motos, muchos de patentes. Ese caso me llamó la atención, roban patentes, quieren hacer la denuncia y los mandar al registro automotor. Si pasa algo con esa patente robada, los responsables son las víctimas de ese robo”, relató el joven.
Por otro lado, deseó que el distrito estuviese un poco más seguro y criticó que se está volviendo “tierra de nadie”. “Hay mucha inseguridad, en todos lados. La gente se está acostumbrando, a que son los chicos de los boliches. Está mal que nos acostumbremos, está mal porque todos trabajamos, tenemos nuestras cosas, y tenemos derecho de reclamar la seguridad. Es algo que se volvió cotidiano y, si no cambiamos la cultura de acostumbrarnos al delito, será tierra de nadie”, concluyó Matías.
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