A medida que avanzan los días, el entramado de sociedades, nombres y propiedades que rodea al escándalo por los bienes de lujo asociados al entorno de Claudio "Chiqui" Tapia continúa ampliándose. En el centro de esa trama, aparece nuevamente Pablo Toviggino, tesorero de la Asociación del Fútbol Argentino, ahora vinculado de manera directa a otra propiedad bajo investigación en Pilar, a partir de registros oficiales hallados en un country de alto nivel.

Este lunes, trascendió un dato que refuerza los vínculos entre Toviggino y Luciano Pantano, un dirigente de bajo perfil, exmonotributista e investigado como presunto testaferro de la mansión ubicada en Villa Rosa, denunciada por la Coalición Cívica que lidera Elisa Carrió. Pantano y su madre, Ana Lucía Conte, figuran como responsables formales de Real Central SRL, la última sociedad propietaria de la imponente vivienda con caballos árabes, helipuerto y piscina, allanada por orden del juez federal Daniel Rafecas.

Esa misma firma, según surge del expediente, es propietaria de dos lotes en el barrio privado Ayres Plaza de Pilar, que fueron unificados para la construcción de una sola casa. Al revisar la documentación del country, el magistrado encontró un dato considerado clave por los investigadores: en los registros de ingreso figuran tanto Pablo Ariel Toviggino como Luciano Nicolás Pantano con la categoría de "ingresantes permanentes", una autorización reservada para propietarios o residentes habituales y no para simples visitas.

La nómina no se agotaba allí. De acuerdo a lo publicado por el canal TN, en el listado también aparecían María Vittoria Toviggino, hija del tesorero de la AFA, y Diego Fabián Pantano, de apellido coincidente con el del presunto testaferro. Incluso, se menciona un quinto nombre correspondiente a una persona menor de edad. Para los investigadores, la coincidencia de apellidos y vínculos familiares refuerza la hipótesis de una red diseñada para ocultar la titularidad real de los inmuebles.

Según fuentes de la causa, la vivienda del country habría sido habitada por la hija de Toviggino durante la pandemia, período en el que incluso se registraron quejas por presuntas infracciones a las restricciones sanitarias vigentes. Al momento de los allanamientos recientes, sin embargo, la propiedad se encontraba deshabitada.

Los registros de seguridad de Ayres Plaza dejaron así una nueva huella documental que une a los Toviggino y los Pantano, profundizando las sospechas sobre el rol del tesorero de la AFA en una estructura de sociedades interpuestas. A esto se suma que las expensas de la vivienda figuraban a nombre de Real Central SRL, al igual que las de la mansión de Villa Rosa. Antes de 2022, esos pagos se emitían a nombre de Wicca SAS, empresa que tuvo como directora suplente a María Florencia Sartirana, exgerenta de Finanzas de la AFA.

Sartirana también aparece ligada a la bodega boutique La Vigilia, ubicada en Tunuyán, Mendoza, proveedora de vinos a dirigentes del círculo de Toviggino. Entre ellos, se destaca la etiqueta Neurus, marca registrada en empresas del entorno del tesorero y nombre que, llamativamente, figura pintado en el helipuerto de la mansión de Pilar. Recordamos que, entre tantos vehículos de lujo e instalaciones de alto nivel, se encontró una cava con numerosas botellas de vino de la marca Neurus, sumando un hallazgo puntual al expediente.