Sábado 20 de Abril de 2024

La inimputabilidad y la falta de mérito, los puntos clave en el juicio por el parricidio de Alberti


  • Miércoles 09 de Octubre de 2019
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  Desde el martes el TOC Nº 7 de San Isidro tuvo a Leandro Acosta y Karen Klein en el banco de acusados por el homicidio de sus padres, perpetrado en septiembre de 2015 en Alberti. Durante la jornada del martes, miércoles y jueves, se lleva adelante el juicio contra los hermanastros Leandro Yamil Acosta, 29 años, y Karen Daniela Klein, de 25. Ambos jóvenes están imputados por el homicidio de sus respectivos padres Ricardo Ignacio Klein (54) y Miryam Esther Kowalczuk (52). El debate se inició el martes a las 10, en el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) Nº 7 de San Isidro, compuesto por María Coelho, Alberto Gaig y Federico Ecke. En el mismo deberán determinar si ambos serán condenados por “homicidio agravado por el vínculo”, delito que prevé la prisión perpetua. La discusión está en torno a la inimputabilidad de Acosta y a la “falta de mérito” de Klein, puntos que se han discutido desde que el crimen se cometió en 2015, en una vivienda de la localidad de Manuel Alberti. La falta de mérito que alude la defensa de la joven le permitió llegar al juicio en libertad mientras que su hermanastro y, en el momento del crimen también su pareja, quedó detenido en la Unidad 34 Neuropsiquiátrica del Servicio Penitenciario Bonaerense. Una pericia oficial estableció que Acosta sería inimputable, por lo cual la justicia deberá resolver hoy si toma o no aquellos estudios. Los mismos establecen que “se trata de un sujeto que padece un trastorno psicótico compatible con enfermedad esquizoafectiva y un cuadro compatible con epilepsia” al tiempo que “presentaba sentimientos de odio y ansiedad hacia ambas víctimas, en especial hacia su madre” a quien acusaba de “permanentes vejaciones desde los 3 años” y de “entregarlo” a sus parejas anteriores para ser abusado sexualmente. El procedimiento debería haber comenzado en mayo pero, debido a complicaciones de salud de Karen Klein se postergó. Klein había declarado que no denunció a su hermanastro y pareja porque “estaba amenazada” pero que no participó de los homicidios. El crimen El homicidio se descubrió el 13 de septiembre de 2015, luego de que uno de los familiares hiciera una denuncia por averiguación de paradero. Karen Klein declaró que, de hecho, el homicidio se perpetuó el 2 de septiembre cerca de las 8.30 cuando los mellizos de 11 años –hijos de la pareja fallecida– estaban en el colegio. La joven relató que Acosta le disparó a su padre en la cabeza cuando éste estaba en la cama y que a su madrasta le efectuó tres disparos cuando regresó de la escuela. Después, el joven se deshizo de los cuerpos desmembrándolos y quemándolos. Los restos fueron encontrados en un baldío a ocho cuadras, en 16 bolsas donde había cenizas, huesos y más restos. Poco después, se comprobó que Acosta había dicho que sus padres los habían abandonado para ir a jugar al casino y que el presunto móvil había sido que su padrastro quería abusar de una de las mellizas.

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