© 2024 Diario Resumen
Luego de casi un mes de investigación, la justicia finalmente identificó a una sospechosa por el crimen de Roberto Wolfenson Band, ingeniero asesinado en su vivienda del country La Delfina. Se trata de la empleada doméstica, quien se ha convertido en la principal acusada del homicidio y que ya fue detenida en un allanamiento en su vivienda, realizado este viernes por la medianoche.
El procedimiento fue realizado por la Sub DDI de Pilar y duró más de dos horas. Allí se encontró un parlante bluetooth rojo que fue reconocido por la viuda de Wolfenson Band como propio, por lo que creen que el móvil del crimen fue efectivamente un robo.
La detenida fue identificada como Rosalía Soledad Paniagua, quien comenzó a trabajar con el ingeniero poco más de un mes antes del homicidio como suplencia de la empleada titular. El reemplazo finalizaba ese mismo día en que se cometió el crimen.
Sin embargo, este no es el único elemento que llevó a la detención: en el expediente hay registros de cámaras de seguridad, rastreo de celulares y comunicaciones que la complicarían cada vez más.
El jueves 22 de febrero era el último día de Paniagua en la casa de los Wolfenson Band ya que el lunes regresaba la empleada titular. Ese jueves se cree que la víctima fue asesinada, a pesar de que la autopsia indicó que la data de muerte es del viernes entre las 13 y 17.
¿Por qué se sospecha que el homicidio fue un día antes? Primero, Wolfenson Band utilizaba su teléfono asiduamente y, según los registros, la última señal enviada fue el jueves cerca de las 14.20.
Además, la víctima no asistió a su clase de gimnasia a las 19 de ese día, sin aviso y cuando sus amigos quisieron contactarse con él, los mensajes no llegaban al teléfono y nadie contestaba los llamados.
Otro dato es que el cuerpo fue encontrado con la misma ropa que tenía el jueves por la mañana, algo que muchos han señalado como llamativo ya que Wolfenson era una persona muy arreglada.
“En el expediente hay prueba irrefutable de que el homicidio se produjo el jueves, más allá de lo que señaló la autopsia.”, explican desde la investigación.
La empleada fue entonces la última persona en ver con vida a Wolfenson. En su momento, al declarar, relató que ese jueves –22 de febrero– cerca de las 14 se tomó un colectivo hasta la estación de Derqui y que, una vez allí, se sentó a esperar la formación del tren. Una cámara la toma en primer plano, manipulando un objeto que se mantiene en reserva, pero sería un dato indiscutible de la participación.
En las próximas horas la empleada será indaga nuevamente, pero esta vez como sospechosa.
1 comentario:
Dejar un comentario