Femicidio de Silvia Saravia: la causa está a un paso de cerrarse

Jorge Neuss asesinó a su esposa en octubre del 2020 con un disparo en la cabeza y luego se suicidó. La fiscal María José Basiglio solicitó la extinción de acción penal por el fallecimiento del femicida.

El 10 de octubre de 2020 Silvia Saravia era asesinada de un disparo en la cabeza por su esposo, Jorge Justo Neuss, en el dormitorio de la vivienda que compartían en el country Martindale. Tras el femicidio Neuss se disparó en la sien: fue trasladado al hospital pero falleció antes de llegar, a causa del daño.

Tras una larga investigación que determinó que no hubo participación de otras personas en el crimen, la fiscal María José Basiglio solicitó la extinción de la acción penal por fallecimiento del homicida.

Así lo informaron a La Nación fuentes judiciales del caso. Además, indicaron que la presentación fue hecha ante el juez de Garantías de Pilar Nicolás Ceballos, que interviene en el expediente y ahora debe resolver sobre el planteo.

“Se determinó que no hubo participación de otras personas en los hechos investigados. Neuss mató a su esposa y después se dio un tiro en la cabeza. Se comprobó la hipótesis investigativa de homicidio seguido de suicidio. La mecánica de lo sucedido quedó establecida”, explicaron.

Con la investigación se determinó que Saravia (69) no había dormido en la escena del crimen ya que, la noche anterior se había ido a la vivienda de su hija Lucila, en la misma urbanización privada, luego de una discusión con Neuss.

Al día siguiente, a las 11, el empresario desayunó en su habitación –tal y como lo recordaron dos empleadas domésticas que declararon como testigos en la causa– y pasado el mediodía, utilizó el teléfono celular para enviar dos mensajes a dos amigos que cumplían años.

Saravia había decidido irse junto a su hija al campo familiar pero debía regresar a su hogar para buscar ropa y otras pertenencias: entre las 12.40 y las 12.45, entró en su casa; les comentó a las empleadas domésticas que había ido a buscar unas cosas y subió a la suite.

Una vez en el cuarto comenzó la agresión y, según las conclusiones de la autopsia la víctima tenía un hematoma en un brazo, provocado por la presión del pulgar del agresor, en su intento por sujetarla. Esa lesión, según los forenses, indicaba que Silvia Saravia se defendió de su esposo.

Mientras Neuss apuntaba con su revólver a la cabeza de su esposa, con su mano izquierda la tomaba del cabello con tanta fuerza que, incluso, le arrancó un mechón. A menos de 20 centímetros de distancia el empresario disparó y Silvia falleció en el acto. Él, luego, se disparó con la misma arma.

En la investigación, se supo, tampoco surgieron pruebas de que el suicidio haya sido inducido. La causa, ahora, está cerca de llegar a su fin.