Jésica tenía 33 años y siete hijos. Ingresó al Sanguinetti con neumonía y su familia denuncia que no fue tratada correctamente y que les avisaron del fallecimiento cuando fueron a visitarla.
Paula Micciullo denunció que desde el Hospital Sanguinetti no le avisaron de la muerte de su hermana hasta tanto no se acercó al nosocomio para poder visitarla. Jésica, de 33 años y madre de 7 hijos había ingresado por una neumonía aguda el jueves pero, según denuncia la familia, no fue tratada correctamente.
Jésica había sido madre recientemente y en el Hospital Meisner habían detectado la neumonía. Fue trasladada al Sanguinetti, de donde se fue para poder ver a su pequeña pero por el cuadro infeccioso, debió ser internada nuevamente el jueves por la madrugada pero, el domingo cuando fueron a verla, les avisaron que había perdido la vida en la madrugada.
“No nos avisaron. Nos enteramos de la muerte de mi hermana 14 horas después, cuando fuimos a visitarla porque nadie nos avisó”, explicó a Diario Resumen Paula Micciullo.
el médico no nos dio explicaciones, nosotros lo contamos para que esto no pase con nadie más
Al llegar fue estabilizada e internada en guardia pero, se encontraba bien. El sábado, sin embargo, comenzaron los problemas: “ingresó convulsionando por la neumonía. Cuando llamaron a la ambulancia, solo le dieron nebulizaciones pero después, cuando volvieron a llamar porque tenía convulsiones, nunca llegó la ambulancia y la llevaron en un auto de un vecino”.
La mujer contó que Jésica ingresó el jueves con una neumonía y que fue colocada en la guardia, donde no le dieron el oxígeno ni los medicamentos. “Fui y no tenía puesto el oxígeno, me dijeron que se lo sacaba y pedí que se lo pusiesen. No tenía suero ni antibiótico que tenía que recibir. Mi mamá reclamó porque una hora después, seguían sin darle los remedios”, agregó Paula.
Sin que las dejasen volver a ingresar porque se terminaba el horario de visita, se volvieron a su vivienda hasta el domingo, en un nuevo horario de visita. Sin embargo, al llegar al nosocomio, todo se derrumbó. “Llegamos y no estaba en la planilla, mi mamá pidió que averigüen y una administrativa nos dijo que un médico hablaría con nosotros. Nos llevaron al fondo y, como si nada, nos dijeron que había fallecido a las 0 horas, nos dio un ataque de nervios”, comentó.
Luego de haber pedido ver el cuerpo, el horro siguió: “la morgue es una vergüenza, cosas sucias. Mi hermana estaba con los ojos abiertos y en posición fetal, no fueron capaces ni de cerrar sus ojos. Nadie nos contestó ni respondió los reclamos. Claramente descubrieron que había fallecido mucho después, porque no la controlaban las enfermeras”.
“El médico no nos dio explicaciones, nosotros lo contamos para que esto no pase con nadie más, a ella no vamos a recuperarla”, cerró Paula Micciullo.
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