Un matrimonio y una adolescente fueron víctimas hoy de un robo en su casa del barrio La Diligencia del emprendimiento Pilará.
Cuatro delincuentes armados entraron por el perímetro del barrio, maniataron a las víctimas y sustrajeron dinero en efectivo y un teléfono celular.
Según información policial los delincuentes abordaron al matrimonio y su hija de 13 años en su vivienda y les sustrajeron 300 dólares, 1500 pesos, y un teléfono celular, dándose finalmente a la fuga.
Tras un llamado al sistema de emergencias 911 se hicieron presentes en la casa personal de la Sub DDI de Pilar y Policía Científica, quienes dieron intervención a la UFI Nº2, a cargo del fiscal Andrés Quintana.
La víctima es un juez laboral de la Ciudad de Buenos Aires, de 60 años, mientras su esposa es prosecretaria de un Juzgado Federal de Comodoro Py. Quienes junto a su hija resultaron ilesas.
“Se estableció que la intrusión se produjo por un sector del perímetro, el cual limita con un campo de amplias dimensiones, el que a su vez se comunica con la Ruta provincial 34”, indicaron fuentes policiales a Resumen.
“No encontraron plata y pensé que nos pegaban un tiro”, contó la víctima al Hechos y Derecho, mientras se mostró indignado por la inseguridad que se vive en el predio. "Es un colador", se quejó en diálogo con ese perfil.
El hombre asaltado era Alberto Calandrino, juez nacional de Primera Instancia del Trabajo, quien dialogó esta tarde con el canal TN sobre el robo que sufrió junto a su familia, y señaló que se despertó al sentir “un golpe en la cabeza” y luego advirtió la presencia de cuatro o cinco delincuentes, “totalmente vestidos de negro”.
“Fueron directamente al dormitorio, trajeron a nuestra hija de otro cuarto, nos maniataron y nos pidieron plata de una forma muy violenta”, relató el magistrado, quien agregó que el asalto duró “una hora”.
Calandrino señaló que los asaltantes le dijeron: “Nosotros no somos ni violadores ni asesinos, pero queremos que nos des la plata”.
“Nos tiraron la casa abajo, revolvieron todas las habitaciones buscando una caja fuerte, nos preguntaron si tenía un arma”, expresó el juez, quien recalcó que es el segundo asalto en el country en los últimos tres meses, por lo que criticó a la seguridad privada del barrio cerrado.
Asimismo, contó que uno de los ladrones intentaba tranquilizarlo a él y a su hija y les pidió que hicieran la denuncia dos horas después, “porque iban a entrar a robar a otra casa”.
“Efectivamente fueron los delincuentes a otra casa, donde sonó la alarma y salieron corriendo”, aseguró Calandrino, quien además expresó que “al no ser una persona muy solvente económicamente”, tuvo “terror” de que pudieran ajusticiarlo.
Según información policial, “Pilará cuenta con cuatro barrios privados que se comunican entre sí, cuenta con seguridad privada de la empresa Watchman con 20 vigiladores por turno, sin armas, con cámaras de seguridad en perímetro y sectores internos, con un total de 325 lotes en 500 hectáreas”.
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