Su familia no sabe nada desde el miércoles a las 19.30 cuando no regresó de hacer los mandados. Su pareja asegura no haberla visto, pero la familia recibió información de que si se habrían visto. Están preocupados porque la relación de ambos no era sana.
Camila Rosa Gutiérrez tiene 25 años y vive, junto a su familia, en una vivienda del barrio Vicente López en Pilar. Su cuarto está construido detrás de la vivienda principal, pero comparte gran parte de su tiempo con su familia.
El miércoles cerca de las 19, Camila salió de su vivienda para ir a comprar a un comercio ubicado a tan solo tres cuadras, pero nunca regresó. “Alrededor de las 19.30 del miércoles 1 de abril. Salió a comprar a la pollería que está acá a tres cuadras. No sabemos si volvió o no, porque le fuimos a preguntar a la señora y dijo que cerró antes, porque no anda nadie en la calle. Camila llegó, vio cerrado y se volvió a casa, eso creemos”, dijo Paola Gutiérrez, una de las hermanas de la joven en diálogo con Diario Resumen.
Para ella lo que ha pasado es que su hermana sí se acercó hasta el comercio pero al ver que estaba cerrado retomó el camino, llegó a la vivienda pero luego, volvió a salir: “Ella se ve que volvió de ahí, pero ella tiene su habitación detrás de la casa de mi mamá y no la vio si volvió a entrar o no. La pollería queda en Antártida Argentina, solo se movió por acá que nosotros sepamos”.
Los únicos datos que tiene son pocos y hasta confusos, porque la pareja de Camila no les ha dicho mucho y, durante las primeras horas, creyeron que ella podría haberlo ido a verlo pero el joven negó que fuese así, aunque la versión después parecería haberse modificado. “Nosotros hablamos con su novio, mi hermanita buscó el número. Él dijo que no estaba con él, incluso vino a casa. Después, hablando con una amiga que habló con un amigo del novio de mi hermana, el chico habría dicho que ellos sí se vieron. Entonces, nosotros no sabemos qué pensar”, dijo.
“Ellos tenían una relación complicada, Dios quiera que este chico no haya hecho nada. Con nosotros él no hablaba, nosotros no estábamos de acuerdo con esa relación, la veíamos medio enfermiza. Nos dice que no la vio pero un amigo de él dice que se iban a ver tarde-noche, cuando ella desapareció y no sabemos entonces si se vieron o no”, explicó Paola y añadió que “ya no sabemos dónde podemos buscar”.
La denuncia fue realizada y la familia relató la situación de la pareja de la joven por lo que los efectivos policiales volvieron a citarlo para que declare, se acercaron a la vivienda de Camila y constataron que solo falta el celular, el cargador y la billetera pero, al momento, no hay pistas. “No se fijaron las cámaras aún, no sabemos nada de eso”, agregó.
Ya no sabemos dónde podemos buscar”
El miedo, para ella, es que algo haya ocurrido con Camila y el deseo es que la policía actúe lo más rápido posible para dar con la joven.
Camila mide 1,50, es delgada y de tez morocha, cabello largo y oscuro. Al momento de su desaparición vestía una remera blanca, short de jean y zapatillas blancas pero, lo que los desconcierta es si ella volvió y se cambió la ropa o si salió nuevamente vestida de la misma forma.
Ante cualquier información sobre el paradero de Camila, comunicarse con Paola al 011-7037-8858.
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