Peronismo Federal: ¿se somete, emancipa o corre detrás de Lavagna?

Comenzada la campaña electoral que ha de marcar el corriente año, parte del peronismo pugna frenéticamente por encontrar un candidato competitivo que le permita lograr la tan ansiada unidad.   Brexit Inglés. En un mundo convulsionado, Gran Bretaña cuna de la democracia occidental, sufre el proceso de separación de la Unión Europea tras casi 45 años de membresía. Esta determinación denominada Brexit, fue decidida por el voto ciudadano en el referéndum llevado a cabo el 23 de junio de 2016. La primer ministro británica Theresa May se hizo cargo del gobierno tras la renuncia de su irresponsable colega David Cameron. Lo hizo en uno de los peores momentos del Reino Unido desde la Segunda Guerra. Cameron organizó el referéndum para salvar su gobierno. La consulta tenía por objeto cerrar definitivamente el disgusto contra la Unión Europea, que por décadas arrastra el ala eurofoba del partido conservador británico. Pero las mentiras en la campaña previa y la subestimación de Cameron respecto de la Unión Europea hicieron posible el triunfo del Brexit y empujaron a Inglaterra a la situación actual. Es así, que el Reino Unido se debate entre una salida consensuada con la Unión Europea o una salida abrupta que podría generar caóticas consecuencias. En este último supuesto podrían esperarse caídas en la producción, el empleo, aumento de la inflación y fuga de capitales. Es decir, un panorama por demás incierto y sombrío para la patria de los Beatles. Como puede advertir el lector, no sólo en nuestra Latinoamérica pululan energúmenos políticos.   Venezuela, Irrealidad Papal, Tratado de Libre Comercio con Chile y Mercosur   El mensaje navideño del Papa Francisco llamando a la “concordia” y a la “reconciliación” a los gobiernos de Venezuela y Nicaragua y sus habitantes sacudió al ámbito sudamericano. La reacción no se hizo esperar. Veinte ex-presidentes de ese continente en una carta dirigida al Pontífice lo criticaron duramente. Al ciudadano común, seguramente, también le resultó incomprensible el mensaje papal. Por cierto, es como pedir la concordia y reconciliación entre el torturador y el torturado. Es intentar cínicamente transformar en víctima al victimario. Todos sabemos, tal como lo expresa la aludida carta, “…que los venezolanos son víctimas de la opresión de una narco-dictadura militarizada, que no tiene reparos en conculcar de manera sistemática los derechos a la vida, a la libertad y a la integridad personal”. Al mismo tiempo señala la misiva “….que el régimen sandinista ha reprimido protestas populares en Nicaragua a un precio de casi 300 muertos”. Las insólitas expresiones papales intentan burdamente ocultar el carácter totalitario de ambos regímenes. Vaya a saber por qué. Buena parte de los líderes de países libres y democráticos de varios continentes, entienden que el segundo mandato de Nicolás Maduro es ilegítimo. Por ello, a la ceremonia de asunción a la segunda presidencia de Maduro no asistieron prácticamente mandatarios de otros países. Ello ocurrió el jueves de la semana pasada y “casualmente” el Vaticano envió un representante al acto. La Santa Sede justificó la presencia del emisario alegando que la misma fue  “… en busca de promover el bien común, tutelar la paz y garantizar la dignidad humana”. La Iglesia de Venezuela está abiertamente en contra de las posturas de Bergoglio y su séquito romano, más preocupados éstos por influir en las internas políticas de países cuyos habitantes sufren dictaduras  como Venezuela y Nicaragua. Y también ocupados en intervenir en la interna populista argentina, en lugar de preocuparse y ocuparse por los graves problemas que en el mundo aquejan a la Iglesia Católica, como los numerosos casos de pedofilia cometidos por sacerdotes y el avance en la prédica de la fe por parte de las comunidades evangélicas. El presidente chileno Sebastián Piñera ha de promulgar en los próximos días una ley que aprobó el Congreso de Chile. Tiene que ver esta ley con un tratado de libre comercio, que puede influir positivamente en generar un cambio significativo en la economía argentina. Este tratado permitirá a la Argentina interactuar económicamente con los países asiáticos y del Pacífico. Se abre una puerta de complementación económica con Chile que ya tiene acuerdos de libre comercio con países cuyos PBI representan un porcentaje importante de la producción mundial y sus habitantes suman más de 500 millones de personas. El pasado miércoles el Presidente Macri llegó a Brasil en visita de Estado. Fue recibido en el palacio presidencial de Planalto en Brasilia por el recientemente asumido presidente del hermano país Jair Bolsonaro. Ambos coincidieron en condenar a la dictadura venezolana que lidera Maduro y en proponer a Uruguay y Paraguay la flexibilización del Mercosur. A través de esta propuesta se busca que cada socio del Mercosur pueda negociar acuerdos de libre comercio con terceros países por separado de los demás asociados del bloque. Es decir, se lograría mayor apertura comercial, reducción de barreras y eliminación de burocracias. La buena sintonía política y económica entre ambos presidentes permite ser optimistas, tal como se anticipara desde esta columna cuando triunfó Bolsonaro en las elecciones,  respecto del futuro de ambos países. Recordemos solamente la directa interrelación existente en materia económica. Por cada punto de crecimiento del PBI brasileño, el PBI argentino tiende a crecer el 0,25, es decir, la cuarta parte.   Peronismo en frenética búsqueda de un candidato competitivo   Luego de un relevamiento de opinión, dado a conocer en los primeros días del corriente año sobre la imagen de 13 potenciales postulantes a la presidencia, el peronismo redobla esfuerzos buscando un candidato competitivo. El citado sondeo mostró que sólo 2 de ellos tienen más imagen positiva que negativa. Ellos son María Eugenia Vidal, actual gobernadora de la Provincia de Buenos Aires y el economista Roberto Lavagna. El otro extremo de la encuesta, con más imagen negativa que positiva, lo encabezan Felipe Solá, Alfredo Olmedo, Axel Kicillof y Sergio Massa en ese orden. Sin entrar por ahora en consideraciones tales como preguntarse si el kirchnerismo-cristinismo es peronismo o no y ateniéndonos al gran invento del general Perón el movimientismo, aparecen en ese espacio político no menos de 9 postulantes a competir por la presidencia. Sergio Massa, Juan Manuel Urtubey, Miguel Pichetto, Juan Schiaretti, Roberto Lavagna, Agustín Rossi, Felipe Solá, Cristina Kirchner y Sergio Uñac son los nombres que pugnan por ser el candidato de unidad para derrotar a Macri. ¿Qué significa candidato de unidad? ¿Unidad de quiénes y para hacer qué, una vez llegados eventualmente a la gestión presidencial? Estos significativos interrogantes ni siquiera se plantean a nivel de los dirigentes antes mencionados. Tampoco se lo plantean dirigentes del socialismo ni del progresismo vernáculo. Por supuesto, la consigna parece ser ganémosle a Macri y después una vez en el gobierno vemos qué hacemos. Muchos de estos dirigentes no quieren acercarse públicamente a Cristina Kirchner, pero los votos que lograría la ex-presidente impiden que esos mismos dirigentes rompan relaciones políticas con ella y empujen al peronismo a una interna democrática para elegir al dirigente que enfrente a la coalición Cambiemos. En los últimos días y pese a los inútiles esfuerzos del ubicuo Alberto Fernández y Axel Kicillof por intentar convencer a votantes y dirigentes políticos, empresariales y sindicales “…que la de hoy, es otra Cristina…”, algunos integrantes del colectivo peronismo marchan en peregrinación a Pinamar. Allí, encuestas mediante, mantienen charlas con el economista Roberto Lavagna. El año en curso promete una gran actividad política. Es de esperar que esos diálogos procuren ir al fondo de los problemas que aquejan al país y no sean sólo charlas cosméticas de marketing electoral.   Fernando Robles Analista político y economista Seguime en www.fernandorobles.com.ar