Jueves 21 de Noviembre de 2024

La sociedad unida


  • Domingo 29 de Septiembre de 2019
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  Por Guillermo Pellegrini Maestro Normal y Licenciado en Ciencia Política Es el umbral que permite convivir con tranquilidad y beneficiarse, es el escalón necesario para que la vida valga la pena ser vivida, es darle valor a la vida. Porque el todo está siempre por arriba de las partes. Debemos tener la capacidad de dejar de lado los intereses personales y sectoriales superando los escollos para trabajar por una sociedad unida. La cohesión social es una forma de convivir, de compartir los recursos, los valores, de respetar y comprender las diferencias que existen en una sociedad. Hay que consensuar, lograr la unidad viendo las demandas, las necesidades, priorizando sin mezquindad. La unidad es lo que da fuerza, puede ser por amistad, por conveniencia o por necesidad, pero sirve. En el mundo moderno se trabaja a resultados y lo que importa es eso, si lo podemos humanizar mejor, tengamos en cuenta de una vez por todas la condición humana y su fragilidad. Con unidad y cohesión te sentís protegido, hay más energía, optimismo y acción; hay más tolerancia, uno acepta ciertas cosas con disposición y buena voluntad, se busca la concordia. Algunos están seguros que en la universalidad del conjunto humano está la madurez y el crecimiento como persona. Cuando alguien viaja por una beca, por trabajo o placer, conviviendo con otros pueblos, las distintas culturas hacen que se vuelva informado, más maduro. Las referencias, el aprendizaje, sirven para valorar el ambiente que lo rodea y por sobretodo, la valoración de uno mismo al enriquecerse con lo vivido. La existencia de diferentes opiniones, junto con el derecho a la libertad de expresión, constituyen la base de la sociedad moderna. La libertad de pensamiento, de religión y de conciencia, están basadas en la posibilidad de poder manifestar todas las creencias y cultos. El libre pensamiento es la búsqueda de la verdad a través de la ciencia, el bien a través de la moral y la belleza a través del arte, es un conjunto de virtudes. Mediante la convicción y la tolerancia se mantiene la cohesión del grupo, de la sociedad. Es como el diálogo: uno puede disentir, pero por ello no se renuncia a las convicciones, se aceptan las diferencias. Si se promueve en la escuela, forma parte de los principios para promover los valores republicanos. Tengamos también un mínimo de umbral de educación ciudadana. Por eso el buen político debe ser primero un buen ciudadano. El núcleo central es pensar en el otro, para ganar confianza compartida y básica. Donde la educación y el estudio conducen al conocimiento en un proceso que nos lleva a la concordia y a la paz, para consolidar la cohesión y la unidad social. Existen herramientas “como los indicadores de convivencia ciudadana, reconocimiento al buen desempeño de los funcionarios públicos, para mejorar la confianza en las instituciones, promover la ética ciudadana mediante la educación urbana”. Cuando al final de una ley se pone “publíquese y archívese”, debería decir “publíquese, explíquese, compréndase y cúmplase”. “Si la relación con la ley es distante no saldremos adelante. Hablar mucho de inseguridad aumenta el miedo, hablar mucho de ciudadanía aumenta la responsabilidad”. Nos dice Aurelijus Mockus, Alcalde de Bogotá. Si somos realistas y creemos con fe republicana y responsabilidad, en un marco de cooperación, nos damos cuenta de que nada tiene que ver con el clima, ni con los recursos naturales. África es el continente más rico en eso, Japón es una isla con maremotos, teniendo un territorio habitable de solo un 30 por ciento  junto a Israel vemos la unidad y el desarrollo de estos dos países y nos damos cuenta que la unión, la perseverancia y el trabajo los lleva a ocupar un lugar de privilegio en el ranking de las naciones. Vemos  Europa con todas sus guerras, eso los hizo crecer, hay respeto, vocación, cuidado de la salud, previsiones y servicios, respeto por los derechos humanos y el medio ambiente, todas sus industrias contaminantes son prohibidas y radicadas en otros lugares. Respetan la convivencia y su calidad de vida, hay cohesión y unidad. “Llegar juntos es el principio, mantenerse juntos es el progreso, trabajar juntos es el éxito”. Henry Ford

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