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Las casi doscientas cómodas butacas de la Sala del Centro Integral de Cultura "Lope de Vega" quedaron prácticamente ocupadas al cumplirse el destacado acto con el que el 19 octubre se puso en marcha. Contó con la actuación y presencia de actores profesionales conocidos y la asistencia de delegaciones de núcleos allegados al quehacer cultural y al teatro vocacional de ciudades vecinas, así como la de invitados especiales, autoridades locales y público.
Comenzó el acto protocolar al ser descubierta una placa recordativa de la trascendente ocasión, en el "hall" del Centro, por un representante del Country SHA entidad donante, y del Intendente, Sr. Daniel Ponce de León. Seguidamente desató la cinta simbólica e invitó a la concurrencia a "ingresar a lo hecho".
Finalizada la interpretación de "Israfel” por el elenco del Teatro Municipal pronunció breves palabras el concejal Dr. Julio Tomás, haciéndose entrega de un presente floral a la actriz Milagros de la Vega. En nombre de la Asociación de Actores recibió otro obsequio similar con una tarjeta mediante la que la entidad lo dedicaba "a la madre del Teatro Argentino”.
Siempre por intermedio del Sr. Labardén esa institución puso en manos del jefe de la comuna una plaqueta recordativa de la inauguración y, seguidamente, el ingreso al escenario del Director de Cultura, Sr. Ángel P. Alonso, motivó escenas de emocional contenido.
Agradeció el Sr. Ponce de León "a la gente de Pilar o no que ayudó" y agregó: "lamento por aquellos que no sepan reconocerlo".
Improvisó el Sr. Alonso sentidas palabras y luego de expresar su satisfacción por "haber logrado la meta que se había propuesto al aceptar la Dirección de Cultura, expresó reconocimiento "a la gente que puso piedras en el camino por haberlo hecho poner mayor empeño en la tarea. Seguidamente leyó un volante cuya autoría se atribuye la Juventud del Movimiento de Renovación y Cambio de la UCR, y agregó: "yo les digo a esos jóvenes que con el dinero que invirtieron en los volantes hubieran podido comprar elementos que reclaman para el Hospital y les recuerdo que mientras no se entienda que lo primero es la educación y la cultura el país va a seguir así para siempre".
Tras expresiones de adhesión de la mayor parte de la concurrencia, el Director del elenco, Jorge Villar y la actriz Virginia Lombardo, hicieron entrega de sendos presentes a Milagros de la Vega y Alfredo Iglesias, quienes algo más tarde -en un restaurante cercano- junto a otros invitados, fueron agasajados con una cena por las autoridades municipales, ocupando entonces la cabecera la actriz visitante, al Director de Cultura, el Intendente y Jorge Villar.
El joven director de Cultura de la Municipalidad, Ángel Alonso, tenía una meta -la conocíamos pero él lo confirmó públicamente-, llegar a concretar la posibilidad de dar a las expresiones artísticas locales, que no son pocas ni despreciables, un lugar permanente y adecuado para su desarrollo y acrecentamiento, al pueblo de Pilar la sala que necesitaba para acercarse a esas expresiones que enriquecen el espíritu y ennoblecen el alma. Pese a dificultades lógicas él y el grupo que lo acompaña lo han logrado.
Muchas fueron las alternativas que dejaron un poco atrás las posibilidades de una crítica objetiva va respecto al estreno de "Israfel", volveremos a ver la obra en las próximas presentaciones para hablar de ella. Pero, para no dejar flotando la impresión de que eludimos la responsabilidad, debemos destacar el trabajo agotador de Jorge Villar sobre la escena -los demás intérpretes descansan durante el desarrollo de la pieza, Villar no-, en un papel que le exige cada instante más. Logra honrosamente su cometido pese a tener en parte del segundo acto como interlocutor a un actor profesional fuera de serie, Alberto Iglesias.
En este primer enfoque no se esfuma la tarea de Félix Cassano, nuevo en este quehacer local, ni podemos dejar de decir algo sobre la labor -para ella rutinaria- de Milagros de la Vega, quien siendo lo que es, aportó mucho con su dedicación a los ensayos, compartidos a través de varios días con la gente nuestra, viviendo durante ese lapso en Pilar y prestándole finalmente a nuestra ciudad el prestigio de su trayectoria y su nombre para una ocasión tan trascendental como lo fue la inauguración de la Sala "Lope de Vega”.
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