El fallecimiento de Juan Manuel García, el comerciante de Villa Rosa, conmocionó a toda la localidad. “El Gallego”, uno de los apodos con los que era conocido así como también “El Gaita”, recibió un disparo en el abdomen el domingo por la madrugada cuando un delincuente ingresó a robar a su local ubicado en Moreno y Ruta 25.
Horas después, perdía la vida debido a las heridas y la localidad entera comenzaba su pedido desesperado de justicia. Toda la secuencia quedó filmada por las cámaras del kiosco y el pueblo comenzó a difundir las imágenes del delincuente, esperando que alguien tuviese alguna pista.
Al momento aún no se ha logrado su detención pero familiares, amigos y vecinos realizarán hoy una movilización reclamando justicia por El Gallego. La misma será a las 20, en el lugar en donde este delincuente le quitó la vida a este comerciante tan querido por todos.
Sobre la causa e investigación, la familia aseguró que esperan novedades de la policía. “Sabemos que tiene tres tatuajes, en cuello, mano y antebrazo. También que mínimo son dos involucrados, porque él salió corriendo y se subió a un Ford Ka Viral negro (que ya habría sido identificado), pero la patente aún no se logró ver porque la cámara principal que es la que está sobre la Ruta 25 y esquina Moreno, frente al Kiosco, no funciona. No estaba funcionando. Si esa cámara hubiese estado, todo sería más fácil”, explicó a Diario Resumen Oriana, sobrina de García.
La joven aseguró que en la zona las cámaras no funcionan y que, de no haber sido por el local que tenía cámaras propias, no se podría haber reconstruido ni haber conocido la cara del malviviente.
“Como familia, los amigos también, esperamos que la policía se mueva, necesitamos que lo hagan para que esto no quede en la nada”, dijo.
Oriana además contó que esa noche su tío no tenía que estar en el comercio, sino que estaba cubriendo a otro empleado porque necesitaba el dinero para poder realizarle la fiesta de 15 años a su hija. “No era su turno, estaba cubriendo a alguien porque quería juntar dinero para festejarle los 15 a su hija, que cumple en julio, querían festejar y él trabajaba día y noche, hacía pintura, trabajaba acá, todo por su hija. La nena tiene Síndrome de Down y también necesitaban el dinero para los estudios, su educación. Él tenía que juntar el dinero, por su familia, por su hija, que era todo para él”, relató.
En el local y en las redes sociales hay decenas de demostraciones de afecto, de pedidos de justicia y de tristeza por el asesinato de Juan Manuel, demostrando que sin lugar a dudas, era una persona que dejaba su huella en la vida de todos los que conocía. “Hay mucha gente, eso demuestra el amor que le tenían a Juan. Él y su hija eran muy conocidos, los quiere todo el barrio”, cerró Oriana.
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