Si no hay respuesta, “en un mes más desaparece toda la gastronomía de Pilar”

El rubro gastronómico aún aguarda por el visto bueno para regresar a la actividad, pero la situación ya se encuentra en un punto límite según apuntan los referentes locales del sector. Deudas y baja en las ventas de delivery.

Desde hace tiempo, los referentes del rubro de la gastronomía vienen demandando la posibilidad de poder volver a la actividad con los diferentes protocolos sanitarios acordes a la pandemia.

Haciendo referencia a una situación apremiante, el correr de los días, las semanas y los meses, comprometen aún más ese panorama, y la desesperación comienza a aparecer en escena. La semana pasada llevaron a cabo una protesta en el kilómetro 50 de Panamericana para hacerse escuchar, pero todavía las puertas de los establecimientos se encuentran cerradas.

“Acá en un mes más, desaparece toda la gastronomía de Pilar. Colegas nuestros que hace 20 o 30 años que trabajan en gastronomía acá, están cerrando. La verdad que no se puede creer. Es muy triste”, señalaron respecto del panorama las propietarias de Antares Pilar, uno de los establecimientos del grupo que demanda respuestas.

“La problemática ya es de público conocimiento, todo el mundo sabe que estamos endeudados y cada día que pasa nos siguen cobrando los mismos impuestos, tenemos que hacer los mismos aportes para los empleados, tenemos deudas con proveedores, el alquiler sigue corriendo. La luz viene con la facturación del mismo período del año anterior cuando estábamos trabajando y Edenor está cerrado para hacer reclamos, así que se hacen por mail y no es muy ágil. Estamos muy preocupados porque ya es mucho tiempo”, aseguraron.

Asimismo, indicaron que no sólo se trata de los dueños de los locales, sino también de los miles de empleados que dependen de ellos. “Nuestros empleados necesitan de su laburo para comer, todos lo necesitamos. Realmente el ingreso es mínimo y semanalmente vamos tratando de darles algo con lo que entra del delivery”, señalaron.

Sin embargo, las modalidades que hoy tienen a su alcance cada vez representan una ayuda menor, ya que la apertura de los restaurantes y bares en municipios vecinos hace que la gente opte por movilizarse a esos lugares.

“Este pedido nos unió a todos los gastronómicos de Pilar, pero del Municipio todavía no tuvimos ninguna novedad. Estamos esperando que nos dejen abrir porque alrededor está todo abierto, con protocolos, cumpliendo la distancia social, utilizando solo los espacios de afuera. Con toda razón, la gente tiene muchas ganas de salir, de encontrarse con amigos o ver otra gente, y en vez de pedir una pizza en tu casa, salís y la comes acá nomás a 20 kilómetros. Nosotros veníamos teniendo una facturación del 1 por ciento de lo que era antes de la pandemia, y ahora bajó a un 30 o 40 por ciento de eso, lo que quiere decir que no se está trabajando prácticamente nada con el delivery y take away”, explicaron.

Finalmente, manifestaron que “según nos dijo el Intendente cuando nos recibió, todo el resto de los municipios están actuando de forma ilegal al abrir, porque el Gobernador no dio el ‘ok’ para hacerlo. Pero nosotros creemos que de alguna manera esos intendentes están apoyando a su gente y sus comercios, buscándole la vuelta para que se trabaje. Al haber tanto silencio de parte del Municipio nos genera miedo”.