Comprar en el comercio local dinamiza y fortalece el ecosistema económico de la localidad y beneficia a todos

Por Gustavo Giacomo, economista   En medio de un complicado contexto económico en el que día tras día se habla de la importancia de apuntalar y fortalecer el consumo interno para tratar de conseguir reactivar la economía doméstica, muchos de nosotros fallamos en lo básico. Algo tan sencillo, como hacer nuestras compras por pequeñas o grandes que sean en comercios de nuestra zona. Lo cierto, es que gran parte de nuestra economía se sustenta gracias a la acción de negocios tradicionales y comercios locales que generan impuestos y sueldos que quedan en el distrito. De nada sirve ni causa ningún efecto concreto, la creación de incentivos fiscales u otra herramienta destinada a mejorar las condiciones económicas de los comercios locales, si luego esos negocios no van a poder consolidarse en el tiempo ni ser viables económicamente porque nosotros, los consumidores, le damos la espalda, no comprando en sus comercios. Si bien en los últimos años se ha venido incrementando la conciencia sobre la importancia del comercio local en la dinamización económica de las ciudades, creo que no viene nada mal insistir un poco más. Comprar en el pequeño comercio del barrio estimula la economía de la proximidad y genera una serie de beneficios que repercuten en el bienestar social general. Cuando los pequeños comercios crecen, estamos creciendo todos. Hay que tener en cuenta que los propietarios de los comercios locales son nuestros vecinos, personas que emprenden con mucho sacrificio y se arriesgan para cumplir sus sueños y prosperar de forma independiente. Por eso, a la hora de realizar nuestras compras cotidianas pensemos en hacerlas en pequeños comercios del barrio. Porque así, estamos contribuyendo con el desarrollo de la localidad a través del valor que generan los comercios a la misma. Que finalmente termina por impactar en forma positiva en la calidad de vida de todos los habitantes de la localidad. Mejorando de esta manera, el lugar donde transcurren nuestra vida y la de nuestra familia.   ¿Por qué comprar en comercios locales?   El primer motivo en comprar en comercios locales, es porqué además de que crean fuentes de empleo, tributan impuestos en el lugar donde tienen su comercio, y generan ingresos genuinos para la localidad,  ya que son el motor económico por excelencia de las ciudades. También, hay que destacar que los pequeños comercios, ofrecen en muchos de los casos, una serie de ventajas que van desde la comodidad y cercanía, a un trato más personalizado. Normalmente, son vecinos comerciantes que están presentes y pertenecen al barrio, que al mismo tiempo reinvierten sus ganancias en la mejora de sus establecimientos, consiguiendo de esta manera que el barrio siga vivo creando oportunidades de negocios nuevas y dándole así, valor a las zonas urbanas.   Comercio de proximidad   El concepto de proximidad es una forma de consumo que se está poniendo nuevamente de moda en todo el mundo. Para que lo entiendas, tiene que ver con los comercios donde tu mamá o tus abuelos compraban los alimentos diarios. Panaderías, verdulerías, pescaderías, carnicerías, mercerías, farmacias y otros establecimientos de pequeño tamaño donde se ayudaba al consumidor a encontrar el producto que buscaba, se le aconsejaba y asesoraba sobre el producto y se lo trataba por su nombre, porque el comerciante y el cliente se conocían desde siempre del barrio. El comercio de proximidad busca suministrarnos los productos que las personas necesitamos en nuestro día a día, evitando desplazamientos innecesarios y pérdida de tiempo, ya que todo lo que necesitamos lo podemos encontrar en las calles del barrio. Afortunadamente, muchos ya se están dando cuenta de la importancia de fomentar este tipo de modalidad poniendo en marcha campañas de concientización como lo están haciendo ciudades importantes del mundo de la envergadura de Barcelona o Madrid, porque el comercio de proximidad es importante para el desarrollo de las ciudades. La diferencia entre un empleado que trabaja para una gran empresa de consumo masivo y el propietario de un comercio local, es que el propietario del negocio conoce cada rincón de su comercio y todos los productos y/o materiales que vende a la perfección. Por lo tanto, es la persona indicada para hacerle preguntas sobre algún producto en particular, asesorarte y despejar todas las dudas sobre lo que querés comprar. Obteniendo así, una verdadera atención al cliente. Los comercios locales y los mercados de barrio son fundamentales para la salud de nuestras comunidades. Es habitual que sus propietarios vivan en la zona, por lo que el dinero gastado en sus comercios también ayuda a fortalecer la economía local. Hay estudios que demuestran que el dinero gastado en comercios de proximidad circula en el barrio tres veces antes de desaparecer en la economía local y un porcentaje importante queda en el distrito. Mientras que la mayor parte de lo gastado en las grandes superficies sale de la región casi de inmediato. Consumir en los comercios de proximidad y fortalecer la economía local, es una buena forma para dinamizar la economía del distrito, y contribuir así a la recuperación de lo que se denomina la economía de proximidad. Esto ocurre porque el dinero que invertimos o gastamos comprando diferentes productos en los comercios de nuestro barrio, sigue circulando por el mismo contribuyendo a la prosperidad económica de nuestro entorno próximo. Ese beneficio redundará en nuestro favor redistribuyéndose a personas y familias cercanas. Por lo tanto, nuestro estado de bienestar y calidad de vida crecerá en forma exponencial al activar el consumo en la localidad, ya que comprar en comercios de la zona es invertir en uno mismo. Por lo tanto, los comercios locales protagonizan la actividad económica de las ciudades y le dan color y razón de ser al barrio. También, contribuyen a mantener la ciudad viva, segura, amigable, multifuncional, comercialmente justa, socialmente equitativa, culturalmente diversa y generadora de empleo genuino y sustentable local. Por todo ello, vale la pena apoyar a estos insustituibles protagonistas que le dan real vida a los barrios y centros urbanos. De verdad, es valioso apoyar al comercio local para generar un ecosistema económico robusto, sostenido y sustentable en la localidad en que vivimos. Que finalmente termina beneficiando a todos independientemente al rol que nos toque cumplir en nuestro distrito. Porque para que la economía beneficie a todos tiene que ser más justa, social y solidaria y esté en nuestras manos poder conseguirlo. Como decía Galeano, "mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, pueden cambiar el mundo".     Razones

1. Desarrollo de puestos laborales en la localidad
2. Fortalece la economía local
3. Promueve una economía mucho más justa, sostenible e incluso, más social.
4. Presta especial atención en la calidad de cada producto que vende
5. Brinda a sus clientes un trato más cercano y también personalizado
6. Llena de vida a las localidades a la vez que mejora las relaciones con la comunidad
7. Brinda un ambiente más tranquilo, en el cual es posible hacer las compras sin estrés ni prisas
8. Paga impuestos y favorece la optimización de los servicios públicos usados diariamente
9. Los comercios locales realizan más compras de materias primas a pymes de la zona contribuyendo a conservar el trabajo de operarios
10. Evitas tomar el coche o cualquiera otro transporte para hacer la compra, con todos los beneficios económicos y ambientales
11. El comercio devuelve una parte del beneficio al barrio, compran en otras tiendas y proveedores.
12. Los comercios dan vida en la calle, lo hacen más limpio, seguro e iluminado.