A lo largo del último mes hemos sido insistentes al referirnos al gran rendimiento que viene desarrollando Santiago Rodríguez Taverna en los certámenes que se llevan a cabo en la burbuja ubicada en la ciudad tunecina de Monastir. La falta de títulos quizás era la espina que venía afectando el balance realizado por el pilarense, habiendo llegado varias veces a la final sin poder alzarse con el título, pero de tanto buscarlo tarde o temprano iba a llegar la recompensa.
La semana anterior le dio la primera probada al éxito en Monastir, al haberse coronado en dobles junto al francés Arthur Bouquier y quería que eso no quede en algo circunstancial por lo que se esforzó para repetirlo la semana pasada en el transcurso del F29. La imaginación del ser humano lleva a que soñemos diversas situaciones, pero son pocas las veces en las que la realidad supera lo soñado y esta es una de ellas.
El representante de nuestro distrito tuvo un desempeño notable a lo largo de todo el certamen para culminarlo con la mayor de las alegrías, producto de los resultados que tanto anhelaba. En materia de dobles volvió a formar pareja junto a Bouquier en busca de retener el título conseguido con antelación y lo pudo cumplir al superar en el encuentro cumbre a la pareja conformada por el español Pedro Vives Marcos y el jordano Abedallah Shelbayh en un partido ajustadísimo que se resolvió a su favor por un marcador de 62–77, 6-3 y 10-6.
Cuando el fin de semana ya arrojaba ribetes positivos para el tenista local la actividad no terminaba ahí, debido a que el buen rendimiento en dobles también se vio reflejado en singles y lo puso en una nueva final. El Duke tenía la clara intención de sacarse la espina que le habían dejado las otras definiciones perdidas y en frente tendría a un duro rival como su compatriota Matías Descotte, el desarrollo de las acciones no sería sencillo y Santiago tuvo que batallar mucho para imponerse por 6-4, 3-6 y 7-5 para gritar campeón por primera vez en el año y alcanzar los cuatro títulos en su carrera.
El derrotero del pilarense hacia la final dejó en el camino al estadounidense Perry Gregg en primera ronda, al argentino Tomás Farjat en los octavos de final, al francés Maxence Beauge en los cuartos de final y al italiano Erik Crepaldi en las semifinales.
Fue una alegría inmensa, pero ya ha quedado atrás y Taverna tiene la mente puesta en una nueva semana de competencia. El debut de la dupla francoargentina ha sido con victoria por 6-4 y 6-0 sobre el tailandés Credit Chaiyarin y el australiano Matthew Dellavedova. En la mañana de hoy hará su debut en singles ante el neozelandés Ajeet Rai.
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