Real Pilar se prepara para uno de los compromisos más determinantes de su joven historia en la Primera B. Esta tarde desde las 17, el equipo dirigido por Gabriel Torres visitará a Flandria por la ida de los cuartos de final en el inicio de su camino en el Reducido, un desafío que llega después de una temporada que lo tuvo como uno de los grandes protagonistas del campeonato.

En su debut absoluto en la categoría, el Monarca no solo estuvo a la altura, sino que fue protagonista de principio a fin al salir subcampeón en el Apertura y también en el Clausura, Real Pilar cerró ambos torneos a solo un punto del campeón Midland, una campaña que sorprendió por la consistencia y solidez mostrada a lo largo de la temporada.

Para Torres, el balance no deja dudas. "Creo que fue muy bueno porque en los dos torneos quedamos a un solo punto. Nosotros recién ascendimos. Tanto los dirigentes como el cuerpo técnico estamos contentos con el resultado. Los jugadores están a full y vamos a pelear el Reducido", afirmó en diálogo con Solo Ascenso.

El entrenador entiende que la temporada dejó poco margen para los reproches. El equipo compitió en todos los frentes, se mantuvo siempre en zona alta y terminó sacándole 15 puntos de ventaja al tercero, un dato que refleja la superioridad sostenida del conjunto pilarense sobre buena parte de sus rivales directos. "No siento que nos haya faltado algo, Midland fue un justo ganador. Estuvimos a un punto, nos faltó ganar ese último partido. Hicimos un buen torneo, somos un equipo nuevo, jugar en Primera B con muchos equipos difíciles, quedamos a un punto en ambos campeonatos, le sacamos 15 puntos al tercero. Después se puede dar o no el ascenso", remarcó Torres, poniendo en contexto la magnitud del recorrido.

Ahora, la historia entra en su tramo más exigente porque el Reducido no permite distracciones y Real Pilar inicia esta etapa sabiendo que cada detalle puede inclinar la balanza, puede que sea injusto si nos ponemos a pensar la diferencia que les sacó a sus rivales a lo largo del año y que a partir de ahora todos corren con las mismas chances. El primer escollo será Flandria, un rival acostumbrado a este tipo de instancias y con experiencia en partidos de eliminación directa. Para el DT, no habrá lugar para la especulación. "Nos vamos a enfrentar a un rival duro, que nos va a pelear y luchar. Va a ser un partido durísimo, pero por suerte definimos de local; eso es sumamente importante", aseguró.

El valor de la localía, en un estadio donde Real Pilar se mostró sólido durante todo el año, aparece como un factor clave. Aun así, Torres dejó claro que su equipo no modificará su esencia ni su propuesta, sin importar el escenario ni el contexto. "Nosotros vamos a jugar de igual a igual en ambas canchas, como hacemos siempre", anticipó.

El historial entre ambas parcialidades es muy joven, porque es la primera vez que comparten categoría, pero Real Pilar ha obtenido beneficio en los dos compromisos disputados a lo largo de la temporada. En el Apertura se trajo una victoria por 1 a 0 de Jauregui con el gol de Brian Martin, mientras que en el Clausura igualaron sin goles en el Carlos Barraza.

El Monarca llega con confianza, convencimiento y un respaldo estadístico que sostiene la ilusión. Fue protagonista, compitió hasta el final y demostró que puede pelearle a cualquiera. Ahora tendrá que revalidarlo en el Reducido, donde el margen se achica, pero el sueño crece.