Matías Rossi seguirá siendo el referente de Toyota en el TC2000
Tras consagrarse campeón en la era SUV, el piloto delvisense renovó su vínculo con Toyota Gazoo Racing YPF INFINIA y continuará liderando un proyecto que dominó la temporada 2025.
El final del 46° Campeonato Argentino de TC2000 YPF INFINIA encontró a Matías Rossi una vez más en el centro de la escena. Junín bajó el telón de la temporada, pero lejos de significar un punto final, fue el inicio de una nueva confirmación para el piloto delvisense, quién continuará como referente del Toyota Gazoo Racing YPF INFINIA durante la temporada 2026, renovando su vínculo dentro de un proyecto que no solo fue exitoso, sino también sólido y coherente en todas sus dimensiones.
La continuidad de Rossi, junto a Emiliano Stang, fue anunciada apenas consumado un año perfecto para la marca japonesa. El triplete de campeonatos en lo que refiere a pilotos, equipos y marcas, no hizo más que ratificar una estructura que encontró el equilibrio ideal entre experiencia, juventud, método y ambición. En ese esquema, Rossi volvió a ocupar el rol que lo distingue desde hace más de una década: el del piloto capaz de liderar sin estridencias y de marcar el camino con resultados.
Desde lo estadístico, la temporada 2025 fue contundente. En apenas 12 competencias, Toyota logró 16 podios y seis victorias, en una campaña donde la regularidad fue tan determinante como la velocidad pura. Rossi cerró el campeonato con 208 puntos, cifra que le permitió asegurarse el título antes del final, mientras que Stang terminó segundo con 186, configurando un dominio interno que nunca derivó en tensiones ni conflictos visibles. Por el contrario, la convivencia deportiva potenció el rendimiento colectivo.
Para Rossi, el valor del campeonato trasciende el número. En un TC2000 que ingresó definitivamente en la era SUV, el piloto local volvió a demostrar su capacidad de adaptación. El Toyota Corolla Cross GR-S, modelo con el que la marca encaró el cambio reglamentario, se transformó rápidamente en el auto a batir, y Rossi fue clave en su desarrollo y puesta a punto, aportando su experiencia para convertir potencial técnico en resultados concretos.
El título también tuvo un peso simbólico. Toyota alcanzó su 27° temporada consecutiva dentro del TC2000 y amplió un palmarés que ya incluye cinco campeonatos de pilotos, cinco de equipos y cuatro de marcas. En ese recorrido histórico, Rossi ocupa un lugar central, no solo por los títulos obtenidos, sino por su rol como referencia deportiva de una estructura que entiende el automovilismo desde la planificación y el largo plazo.
A lo largo del año, Rossi volvió a exhibir esa madurez competitiva que lo distingue: ganó cuando fue necesario, administró cuando el contexto lo exigía y sumó puntos clave en fechas donde el campeonato se definía más por la cabeza que por el acelerador. En paralelo, Stang aportó velocidad, audacia y hambre de gloria, empujando al equipo a elevar su nivel sin romper la armonía interna.
"La dupla fue muy satisfactoria. Fuimos campeones en todo lo que se puso en juego y tenemos la convicción de darle continuidad a este proyecto", sintetizó Darío Ramonda, responsable del equipo. Sus palabras reflejan una decisión que va más allá de la coyuntura: sostener a Rossi es sostener una forma de competir, una identidad clara y un estándar de excelencia que Toyota considera irrenunciable.

