Una semana antes de la vuelta a la actividad post pandemia nos encontrábamos con la noticia de que Tomás Arrotea decidía abandonar su cargo como entrenador del plantel de Primera División de Real Pilar. Fue allí donde los directivos de la institución apostaron fuerte y contrataron a un entrenador sin experiencia en la categoría, Luca Marcogiuseppe, para ir en busca del tan ansiado ascenso a la B Metropolitana.
El andamiaje del equipo bajo las órdenes del entrenador fue muy bueno, debido a que mantuvo por los mismos carriles en cuanto al estilo de juego y se le sumaron nuevos futbolistas que le dieron un salto de calidad importante. El Monarca fue el mejor equipo en la Zona Campeonato de la Primera C al imponerse en cinco de los seis compromisos disputados, igualó el restante, y se ganó el derecho a jugar la final por el ascenso ante Cañuelas, donde igualó 0 a 0 y le jugó en contra la ventaja deportiva.+
El último partido fue ante Ituzaingó por los cuartos de final en busca del otro ascenso, donde igualaría 0 a 0 y caería en los penales.
Este fin de semana, a través de sus redes sociales, el club dio a conocer la noticia de que el entrenador presentó su renuncia para dar un paso importante en su carrera e irse a dirigir a Unión La Calera de Chile. Con este equipo afrontará el gran desafío de dirigir la próxima edición de la Copa Libertadores de América, debido a que viene de obtener el subcampeonato en el torneo local bajo la conducción de Juan Pablo Vojvoda.
Los directivos de Real Pilar también se encargaron de dejar en claro que no habrá necesidad de salir a buscar un nuevo cuerpo técnico. Esto se debe a que Omar Pouso, quien se desempeñaba como ayudante de campo, pasará a hacerse cargo del primer equipo.
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