Por la revancha de los playoffs de segunda división, el conjunto rojinegro visitó a Gimnasia en su cancha donde el local tenía la fiesta preparada luego de una contundente victoria por 3 a 0 en el Microestadio Juan Borsani. Con un estadio colmado en todos sus rincones el marco estaba preparado para una final donde el Lobo debería cerrar la serie y Derqui intentaría estirarla a un partido más.
El inicio de la noche llevaba a presentir un desenlace negro para los derquinos, debido a que todo parecía ser una continuidad del primer juego y con un contundente 25 a 16 los platenses se acercarían al título. En el segundo Derqui comenzó a hacer la diferencia a partir del saque y se metería en el juego, sin embargo Gimnasia no bajaría su nivel y con un ajustado 25 a 23 en el marcador logró ponerse 2 a 0 para estar a un set de obtener el doble ascenso.
El tercer parcial volvió a tener paridad y se resolvió por detalles, los de Andrés Ligorria supieron aprovechar las imprecisiones del local para imponerse 25 a 23 y estirar un poco más la definición. La historia culminaría en el cuarto, donde los triperos supieron actuar con lucidez en los momentos decisivos para cerrarlo con un 25 a 21 y gritar campeón.
Con la historia consumada, tuvimos la posibilidad de dialogar con Andrés Ligorria acerca de lo que le ha dejado este resultado en la definición de la Segunda División Metropolitana. “Claramente no son sensaciones alegres, pero perdimos una final porque nos tocó jugarla. Las sensaciones de jugar una final es algo muy lindo, nos queda el sinsabor del resultado y cuando se gana es todo lindo y los errores quedan de lado y si perdes se empiezan a ver los errores”, comenzó relatando.
A la hora de realizar un análisis del juego en territorio platense, el entrenador del elenco rojinegro se mostró conforme por la imagen que dejó su equipo. “Fue un buen partido, pudimos jugar una final pareja como tendría que haber sido en el primer partido y después se terminó resolviendo por detalles. El primer set fue malo, pero después encontramos el camino, con rotaciones y cambios nos metimos en el partido”, mencionó.
“El balance general es que ellos vinieron con hambre a robarnos la victoria en casa y a nosotros nos dejaron llevar las emociones y no pudimos jugarla con la entereza que requiere un partido así. Las sensaciones en La Plata fueron buenas y es una pena el primero porque podríamos haberlo hecho delante de nuestra gente, que es lo que más nos dolió”, agregó en relación a la dura derrota que habían sufrido en casa durante el inicio de la serie.
La valoración de lo hecho por el equipo también transita por los caminos de la gratitud. “El balance es más que positivo claramente, donde empezamos una temporada larga complejísima la última semana de enero con la pretemporada y terminamos jugando hasta mediados de diciembre. El hecho de jugar todo el año ya hace que sea positivo”, señaló.
Para finalizar la charla, hizo alusión a lo que pensaba del equipo al inicio y lo que le terminó entregando. “Teníamos pensado hacer una buena campaña porque a pesar de tener un equipo completamente diferente al del año pasado, con el que habíamos jugado la semifinal con Lanús, teníamos con que ser protagonistas. Nos encontramos con un equipo que de a poco se fue formando y pudimos estar a la altura del torneo”, concluyó.
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