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El espacio de la Dirección General de Deportes sumó muchos alumnos, generó competencias y acumuló grandes resultados. Lo más destacado fue el título Panamericano Sub 12 de Belén Francisco. También se alcanzaron dos medallas en los Juegos Bonaerenses.
Después de un 2017 que marcó un punto de inflexión siendo uno de los mejores años del espacio desde que se llevó a cabo su creación, la Escuela Municipal de Ajedrez acaba de finalizar otra temporada de altísimo vuelo en la que ha recolectado grandes experiencias.
Es que, por un lado y como ya es habitual, las clases que se desarrollaron durante cuatro días a la semana a lo largo de todo 2018 contaron con una gran asistencia por parte de vecinos provenientes de distintos puntos del distrito y de todas las edades, mientras que por el otro, los resultados en las competencias de diversa índole en donde se presentaron volvieron a sonreírle a los ajedrecistas locales que de esta manera se encargaron de dejar bien representado a Pilar.
“No hay dudas que fue otro año con signo positivo para la Escuela Municipal de Ajedrez. El trabajo de los profesores es muy bueno y reconocido por todos, mientras que los alumnos son cada vez más y demuestran un compromiso importante. Y por si esto fuera poco hubo resultados muy importantes como el título Panamericano de Belén Francisco”, consideró la directora general de Deportes, Florencia Donatti, al realizar un balance sobre el año de la actividad.
En el mismo sentido, El joven Maestro Papez, aseguró que el año fue muy bueno. “Como ya es costumbre, pudimos hacer varios torneos de buen nivel y darle competencia a chicos que están empezando”, argumentó quién se encuentra al frente del desarrollo de la disciplina en nuestro distrito.
“También tuvimos un recambio de estudiantes, al igual que todos los años. Algunos abandonaron por distintos motivos pero aparecieron nuevos jugadores y también hubo otros que retomaron luego de haberse alejado durante algunos años por lo que la matrícula siempre estuvo a tope”, amplio Papez, quién se mostró ampliamente satisfecho con el trabajo que pudo llevar a cabo durante el año.
Y siempre apuntando con una visión positiva con respecto al porvenir, hizo una comparación con el 2017 en la que subrayó que “creo que este año el entusiasmo por el ajedrez en Pilar fue mayor en relación al año anterior”. Lo que es demasiado bueno para el desarrollo de la especialidad.
Por otra parte y en materia de resultados, el nombre propio que volvió a destacarse a lo largo de la última temporada fue el de Belén Francisco, quien llevó adelante un rendimiento extraordinario en la mayoría de las competencias en las que fue de la partida pero por sobre todo ha escrito una página importante en la historia al proclamarse Campeona Panamericana Sub 12 durante el certamen celebrado en Santiago de Chile. “Consiguió un logro histórico y tener en Pilar a la mejor ajedrecista del continente es todo un privilegio para nosotros”, elogió Papez a su alumna. Ya el año pasado, Belén había sido la primera alumna de la Escuela Municipal de Ajedrez en coronarse Campeona Nacional y en esta oportunidad se encargó de volver a situarse en los primeros planos para demostrar que aquel logro no fue casualidad.
El cetro continental le permitió a Francisco participar del Mundial de España, en el que también construyó una muy buena performance y quedó 39°. Además, la joven pilarense se alzo con la medalla de plata en su primera participación en la final Provincial de los Juegos Bonaerenses, el mismo metal que se colgó al pecho Lucas Zárate.
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